Cada vez es más normal ver a los osos entrando y saliendo de casas, en escuelas, centros comerciales y deambulando sobre avenidas. Esta es una tarea difícil para Parques y Vida Silvestre de Nuevo León, quienes por encima de atender los avisos y cuidar a la ciudadanía, también tiene que proteger la vida del ‘Ursus americanus’, especie de oso considerado en peligro de extinción.
El oso negro americano frecuentemente baja de las montañas y pasea libremente por las calles de Monterrey y de otras grandes ciudades del estado de Nuevo León, hasta que alguien da aviso a las autoridades.
Y aunque el ursus americanus es una especie que pareciera ser inofensivo, lejos de eso, es un animal salvaje y completamente impredecible.
Te podría interesar
Pero el hecho de que estos osos merodeen por avenidas y calles de la metrópoli regia en estas fechas, tiene su explicación.
Te podría interesar
En primera, estos animales hibernan para enfrentar la escasez de alimento, por lo que desde finales de verano y todo otoño se dedican a comer alimentos ricos en carbohidratos, para incrementar sus reservas útiles para el sueño invernal, de acuerdo con la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Y esta es exactamente la temporada para los osos negros, de recolectar su alimento.
A medida que aumenta la población del estado, pues los habitantes se han desplazado hacia las faldas de las montañas que rodean esta urbe, la convivencia con estos animales es más invasiva para ellos, que para los humanos.
Segunda, los osos negros también llegan a la ciudad debido a la sequía, pues al haber escasez de agua y alimento buscan acercarse más a las zonas urbanas con el fin de conseguir comida y líquidos, por eso suelen verse en basureros, albercas y en zonas un poco más húmedas que otras.
Edgar Acosta, director general de Parques y Vida Silvestre de Nuevo León, había mencionado en una reciente entrevista que para los osos es mucho más fácil alimentarse de la basura de los contenedores, que de las hormigas de un árbol en su hábitat. Por lo que esto puede considerarse un serio problema, pues los osos buscan regresar al lugar donde percibieron que encontraron un "manjar", que para ellos es la comida de la basura.
Es por ello que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), exhorta a la población a no ofrecer alimentos a los osos cuando los vean, así como resguardar en un lugar seguro la basura para evitar que éstos se acerquen a las áreas de convivencia humana, y que después deseen regresar.
Si observas un oso, no te acerques, no pierdas la calma, no los alimentes, no los fotografíes, no dejes basura a su alcance, no lo molestes, no le arrojes objetos y llama al 911.
Nuevo León es tierra de osos. Y aunque hay más de cinco millones de habitantes en el estado, este también es el hogar del oso negro.