Las balas en Sinaloa no han parado desde el pasado 09 de septiembre, cuando se empezaron a registrar diversos enfrentamientos armados que hasta hoy en día, continúan. Dentro de esta violencia, está el caso de Juan Carlos Sánchez Palacios, un abogado que fue asesinado por accidente, cuando fue confundido por un sicario.
Este hecho ha causado conmoción y evidente enfado por parte de sus familiares y círculo cercano, pues se dice este profesor de derecho de 34 años, perdió la vida cuando trataba de poner a salvo a su esposa e hija, pues se habían quedaron atrapados en medio de un fuego cruzado entre autoridades y presuntos sicarios, el pasado sábado 21 de septiembre.
Ese mismo día, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, había confirmado que, un total de 600 elementos del Ejército Mexicano llegaron a la entidad con el fin de fortalecer las estrategias de seguridad, debido a los hechos violentos de los últimos días.
Te podría interesar
Aunque las autoridades no dieron detalles, algunos medios informaron que el enfrentamiento en el que fue asesinado el abogado, se trataba de un operativo para detener a "El 27", jefe de seguridad de Los Chapitos, en Culiacán.
Te podría interesar
Fue un ‘daño colateral’: Rubén Rocha Moya
Luego de que se diera a conocer la muerte de Juan Carlos Sánchez, el gobernador Rubén Rocha Moya, dijo que este pudiera ser un “daño colateral”, pero "no lo puede asegurar", por lo que le corresponde a la Fiscalía determinar qué pasó.
Esta respuesta por supuesto que no deja tranquila a la ahora viuda del abogado, y al resto de su familia, donde, además de ser asesinado “de forma accidental”, la imagen de Juan Carlos comenzó a ser manchada, tras confundirse su identidad, con la de alguno de los civiles armados que se enfrentaron a la policía.
“No queremos que se manche el nombre de mi hermano. Era un hombre bueno, un padre de familia de una niña de ocho meses”; dijo Rafael Sánchez, hermano de la víctima, en declaraciones para ‘El País’.
El abogado, Juan Carlos Sánchez Palacios murió en el sector Tres Ríos en la capital de Sinaloa, y su deceso es solo una pequeña de los rezagos que está dejando la violencia en la entidad.