Después de golpear hasta el cansancio a su pareja sentimental y a sus dos hijos menores de edad, Eduardo Alejandro Olmos Romero intentó quemarlos, pero la niña de ocho años, escondió los cerillos para evitar una múltiple tragedia.
El Tribunal de Enjuiciamiento le impuso sentencia condenatoria de 54 años y dos meses, en virtud de los alegatos precisos y con un amplio cúmulo de pruebas expuestas por fiscales capitalinos, informaron autoridades judiciales a MVS Noticias.
El día de los hechos, 31 de julio de 2022, Eduardo Alejandro Olmos Romero, su pareja Yazmin y sus hijos Diana y Mateo, de 8 y 6 años de edad, asistieron a una fiesta, donde el agresor ingirió bebidas alcohólicas en exceso.
De acuerdo con las investigaciones, eso generó una discusión, por lo que las cuatro personas regresaron a casa en el pueblo de San Lorenzo, alcaldía Iztapalapa.
Eduardo Alejandro siguió los reclamos y desató su ira contra su pareja Yazmin; la tundió a golpes y por unos minutos la dejó inconsciente.
Los dos hijos intervinieron y también fueron blanco de una golpiza; la niña, incluso, recibió un golpe en la cabeza con un plato.
No conforme con los puñetazos y patadas que propinó a los tres, les roció aceite de cocina, un polvo lava trastes y a Yazmin le metió por la fuerza alimentos en la boca.
Después, abrió las hornillas de la estufa, pero la niña alcanzó ocultar los cerillos y evitó que murieran calcinados.
La Policía de Investigación lo detuvo, se le procesó y finalmente recibió sentencia de más de siglo de cárcel por dos intentos de feminicidio y un intento de homicidio calificado.
La pena deberá cumplirla en el Reclusorio Oriente, con el pago de una multa, indemnización y la reparación del daño.
Su fecha de salida será en mayo del año 2070, indicaron fuentes judiciales.
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