Cuatro elementos del Ejército mexicano que abatieron a cinco civiles durante los hechos registrados el 26 de febrero en Nuevo Laredo, Tamaulipas, fueron vinculados a proceso por el delito de desobediencia.
Fuentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) precisaron que este proceso es independiente de las responsabilidades a las que se podrían hacer acreedores como resultado de las investigaciones que realizan las autoridades civiles.
Detallaron que esos cuatro elementos, quienes fungían como artilleros, son parte del primer vehículo militar que persiguió a la camioneta tipo pick up en la que viajaban los siete civiles.
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En tanto, la Fiscalía General de la República (FGR) continúa con la integración de la carpeta de investigación que se inició en contra de los cuatro militares, motivo por el cual los agentes del Ministerio Público de la Federación asignados al caso recaban entrevistas y realizan diligencias en materia pericial.