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Lo relevante no es disminuir la violencia, sino erradicarla: Ernestina Godoy

La fiscal agregó que por esa razón el trabajo de la institución a su cargo también es preventivo, “aunque toque a otras instancias, a otras instituciones”.

Ernestina Godoy, fiscal de la CDMX.
Ernestina Godoy, fiscal de la CDMX.Créditos: FGJ
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La meta no es que la violencia, la meta es erradicarla, y aunque a la Fiscalía no le toca la prevención, busca que no haya impunidad, aseguró Ernestina Godoy Ramos, titular de la Fiscalía General de Justicia capitalina (FGJ).    

Durante la clausura del “Conversatorio “Derechos Humanos de las Mujeres y Justicia”, dijo que la mejor manera de prevenir es que haya consecuencias para quienes causen daño a niñas, adolescentes, mujeres, y adultas mayores.

Agregó que por esa razón el trabajo de la FGJ también es preventivo, “aunque toque a otras instancias, a otras instituciones”.

“Por eso es todo el esfuerzo de un nuevo modelo de investigación, una especialización, una certificación; nuevas condiciones físicas”, incluso con instalaciones, remodelarlas.

También, una nueva forma de brindar atención y acompañamiento a todas las mujeres que llegan -muchas en el peor momento de su vida-, “para que no les opriman más el corazón”.

Dijo que se ha construido una comunidad alrededor de la Fiscalía, porque se atiende se y escucha a quienes desinteresadamente nos apoyan.

“Sobre todo, hemos escuchado a las víctimas, atendemos a las colectivas, atendemos a las madres”.

La posibilidad de dialogar con sociedad civil, con colectivas, con organizaciones no es fácil, especificó, porque hay una historia donde se desconfía de la autoridad, donde se cree que a veces es pérdida de tiempo.

Afirmó que el estar en contacto con las víctimas les da más fuerza para tratar lo que sea, “saber que la tarea de procurar justicia es de las más nobles  que hay desde el servicio público porque es abrir las puertas de la justicia”.

Dijo que cada vez que terminan los diplomados, los conversatorios, se busca que los servidores y las servidoras públicas junto con las especialistas desde la práctica, desde la lucha o desde la academia se junten, que “haya conclusiones y que atiendan esas conclusiones”.