La casa de campaña que utilizó Andrés Manuel López Obrador para la campaña presidencial fue motivo de desalojo por una orden judicial efectuada esta mañana por agentes de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
Se trata del inmueble ubicado en la calle de Chihuahua y Monterrey, así como otro que se localizada en la calle de Mérida, ambos de la colonia Roma Norte, alcaldía Cuauhtémoc.
El abogado penalista Gabriel Regino precisó que el allanamiento y despojo ilegal de ambos inmuebles se suscitó el 28 de enero de 2021 por militantes de Morena que manifestaron su indignación por la designación de candidaturas para contender a las elecciones del 6 de junio de ese año.
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Derivado de este hecho delictivo, el despacho que encabeza Regino García interpuso denuncias ante la Fiscalía capitalina en julio y agosto de ese mismo año, por la posible del delito de despojo de inmueble.
Uno de estos fue ocupado durante los meses en que el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo proselitismo y fue punto de reunión de conferencias de prensa que a diario se realizaban para dar a conocer su plataforma electoral.
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Sin embargo, tres años después militantes de su propio partido se inconformaron por el reparto de candidaturas y optaron por apoderarse ilícitamente de ambos inmuebles a cargo de Morena.
Estos hechos quedaron asentados en las carpetas de investigación 00638/07-2021 y 0074/08-2021, en las que se identificó a los implicados que lujo de violencia ocuparon los inmuebles.
Además, se acreditó ante la autoridad ministerial la legítima propiedad de los afectados, y en el caso de Chihuahua y Monterrey el propietario es el mismo partido Morena.
El penalista Gabriel Regino detalló que los despojos son de disidentes inconformes con las decisiones tomadas por la colectividad.
“Desde hace varios meses y con motivo de disputas entre grupos de un partido político, varios disidentes tomaron la decisión de propia autoridad de apoderarse y despojar, ocupar ilegalmente dos sedes que el partido político tiene en la Ciudad de México.
“Una en la calle de Chihuahua, otra en la calle de Mérida y no permitieron durante varios meses que fueran utilizadas por los arrendatarios que es el partido político, generando una serie de perjuicios no sollmente para ellos, para los arrendadore, etcétera”, comentó.
Durante la diligencia en la que participaron agentes de la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales y Materia de Protección Urbana y policas antomotins de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) se liberaron ambos predios sin que se registrara algún enfrentamiento o conato de violencia.
Las pesonas que ocupaba ambos inmuebles se retiraron al notar la presencia policial, pero las investitgaciones siguen en curso para fincar posibles responsabilidades penales a quienes los mantuvieron invadidos.
El delito de despojo contempla una penalidad de hasta 10 años de prisión en caso de que la autoridad judicial determine la responsabilidad de aquellos que se encuentren bajo investigación.
@amarilloalarcon