A dos años de los asesinatos de los sacerdotes Jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, así como del guía de turistas Pedro Palma, las iglesias de la Compañía de Jesús en todo el país replicaron sus campañas en punto de las tres de la tarde y en su memoria inició la tercera fase de los diálogos por la Paz en México.
En su honor se realizaron misas en Cerocahui, Chihuahua y en la Ciudad de México se develó un mural con sus rostros y un corto en el que se relata su historia y que recuerda que ambos perdieron la vida al tratar de auxiliar a una persona que fue agredida por un delincuente en el interior de su iglesia.
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En las ceremonias religiosas se les recordó como dos sacerdotes dedicados a su comunidad, como seres humanos buenos y de trato bondadoso, por esas razones viven en los corazones de sus comunidades, familiares y amigos, por ser instrumentos de gracia, amor y misericordia.
Las muertes de los jesuitas y de dos laicos hace dos años en la comunidad, dieron pie a los trabajos para la pacificación de México que lograron unificar a la academia, organizaciones, religiones y organizaciones, quienes han anunciado la tercera etapa de los Diálogos por La Paz.
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El mural conmemorativo develado en la Parroquia de la Sagrada Familia en la CDMX, servirá como un recordatorio del martirio al que fueron sometidos los dos sacerdotes, el fruto que sus vidas dejaron y el reto de aportar a través de las diversas iniciativas para lograr la pacificación del país.