El 12 de diciembre, la presidenta Claudia Sheinbaum envió al Senado un dictamen crucial para implementar su plan de construir un millón de viviendas sociales. La reforma, que implica cambios en la Ley Infonavit y la Ley Federal del Trabajo, generó opiniones divididas. En su núcleo, busca aumentar el acceso a viviendas dignas para los trabajadores, pero la incertidumbre sobre el destino de los ahorros de los derechohabientes encendió el debate.
El 13 de diciembre, el Senado aprobó el dictamen, que fue enviado a la Cámara de Diputados para su discusión. Sin embargo, debido al cierre del periodo ordinario, la discusión quedó pausada. A pesar de esto, la reforma dividió a los legisladores, con algunos a favor y otros en contra, alertando sobre el impacto en los recursos de los trabajadores.
¿Qué propone la reforma a la Ley Infonavit?
Entre los puntos clave de la reforma se destacan las modificaciones en el modelo de vivienda social. El Infonavit, ahora también constructor de viviendas, crearía una empresa filial para gestionar la construcción y mantenimiento de inmuebles, utilizando recursos tanto del presupuesto anual como del propio patrimonio del instituto. Además, se regularía el arrendamiento social, permitiendo que los trabajadores puedan rentar viviendas cerca de sus centros de trabajo y, eventualmente, comprarlas usando su subcuenta de vivienda como garantía.
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Pros de la reforma:
- Acceso a vivienda digna: Los trabajadores podrían acceder a viviendas a precios más accesibles y cercanas a sus lugares de trabajo.
- Fomento a la construcción social: El Infonavit se convertiría en constructor, garantizando que las viviendas sean desarrolladas con orientación social, favoreciendo a los sectores más vulnerables.
- Arrendamiento flexible: La posibilidad de rentar antes de comprar ofrece más opciones para los trabajadores que no cuentan con los recursos suficientes para adquirir una vivienda de inmediato.
- Mejora en la regulación del arrendamiento social: La reforma establece un marco legal más claro para proteger a los inquilinos y garantizar que los alquileres no excedan el 30% de su salario.
Contras de la reforma:
- Riesgo sobre los ahorros de los trabajadores: La oposición ha señalado que, con esta reforma, el Infonavit podría disponer de los recursos de la subcuenta de vivienda, poniendo en riesgo el ahorro de los trabajadores.
- Falta de transparencia: La reforma otorga mayores poderes al gobierno dentro del Infonavit, lo que podría reducir los controles internos y aumentar el riesgo de malas administraciones de los recursos.
- Desconfianza en la gestión: La figura de Infonavit como constructor podría generar dudas sobre la calidad y viabilidad de las viviendas, especialmente si el gobierno no cumple sus promesas.
- Posible abuso del poder: Con un mayor control sobre las subcuentas de los trabajadores, algunos temen que los fondos sean usados para otros fines que no beneficien directamente a los derechohabientes.
¿Por qué se pausó la discusión?
Aunque el Senado aprobó el dictamen el 13 de diciembre, la Cámara de Diputados no logró dictaminar la reforma antes del cierre del periodo ordinario. Esto generó la expectativa de que se convoque a un periodo extraordinario, aunque el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, ya descartó esta opción, y la discusión continuará en 2025.
El retraso en la discusión se debe también a las tensiones políticas entre la oposición y el gobierno. Mientras algunos alegan que la reforma es fundamental para garantizar una vivienda accesible para todos los trabajadores, otros denuncian la posible afectación a los recursos de las subcuentas y el debilitamiento de los controles internos en el Infonavit.
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La reforma a la Ley Infonavit es un tema de gran relevancia, ya que impacta directamente en los derechos de los trabajadores y en su capacidad para acceder a una vivienda digna. Aunque sus objetivos son positivos, los riesgos asociados a su implementación generan incertidumbre y división. La discusión continuará el próximo año, pero es importante que se aclaren las dudas y se garanticen los derechos de los trabajadores antes de que la reforma avance.