Residentes de Cumpas, Sonora, atacaron a balazos a un oso negro que corría por las calles en busca de comida y agua.
Gracias a diversas fotos y videos que circulan en redes sociales, se pudo captar a un oso que corre asustado por la zona ante la presencia de la gente. Momentos después, residentes de esta villa lo atacaron con un arma de fuego, provocándole la muerte de forma inmediata.
El osezno intentó refugiarse en el patio de una vivienda y posteriormente fue asesinado con impactos en la cabeza a manos de los pobladores.
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¡Precaución, las siguientes imágenes pueden ser sensibles!
Atentado contra la vida animal
El alcalde de Cumpas, Diego Urías, declaró que en ningún momento se dio la orden de sacrificar al oso, por lo que se está iniciando con las investigaciones en el caso.
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Este hecho se considera un delito contra la biodiversidad, y puede llegar a castigarse con hasta 9 años de prisión, de acuerdo con el artículo 420 del Código Penal Federal.
Hasta el momento, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, no ha dado ninguna declaración respecto a este caso, sin embargo, se espera que emitan algún tipo de información en las siguientes horas.
El caso de Coahuila
Justo en el pasado mes de agosto, en el estado de Coahuila, residentes de Castaños junto con la policía municipal, participaron en uno de los actos más violentos que se tiene registrado hasta el momento, ya que torturaron hasta la muerte a un ejemplar de oso negro de 4 meses de nacido.
Este hecho causó gran indignación por la complicidad de las autoridades y el cinismo de los atacantes quienes se reían del animal mientras lo ahorcaban y maltrataban.
El asesinato del oso negro en Sonora es una alerta para que las entidades donde albergan estos animales reciban una mayor protección.