La tarde de este jueves, la Línea A del Metro de la Ciudad de México, que va de la estación Pantitlán a La Paz, registró una interrupción en el servicio luego de que un hombre ingresara a la zona de vías y escalara los cables de alta tensión, poniendo en riesgo su vida y la operación del sistema.
El incidente ocurrió entre estaciones, lo que obligó a personal del Sistema de Transporte Colectivo (STC) a cortar la energía eléctrica de manera inmediata y activar los protocolos de seguridad. Durante varios minutos, el servicio fue suspendido en lo que se realizaban las maniobras de rescate y aseguramiento de la zona.
A través de redes sociales, pasajeros afectados compartieron videos y fotografías del momento. En las imágenes se puede observar al individuo, con el torso descubierto, sostenido entre los cables que corren paralelos a las vías.
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Una vez controlada la situación, autoridades del Metro lograron retirar sin lesiones al hombre, quien aparentemente se encontraba en situación de calle. Aunque su identidad no ha sido revelada, fue puesto a disposición del Ministerio Público para deslindar responsabilidades.
Tras su detención y el restablecimiento de las condiciones seguras, el servicio de la Línea A fue reanudado sin mayores contratiempos.
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El STC Metro exhortó a los usuarios a no ingresar a la zona de vías bajo ninguna circunstancia, ya que este tipo de acciones no solo ponen en riesgo la vida de quienes las cometen, sino también afectan a miles de pasajeros.
“Exhortamos a las personas usuarias a no descender a las vías bajo ninguna circunstancia, respetar la línea de seguridad y seguir las indicaciones del personal. Estas acciones previenen incidentes y garantizan un viaje seguro para todas y todos”, señaló el Metro de la CDMX en su cuenta oficial de X.
El incidente ocurrido esta tarde, cuando un hombre ingresó a una zona restringida del Metro de la CDMX para subir a los cables, reitera la importancia de que, como usuarios, debemos respetar las normas de seguridad. Este sistema de transporte, que moviliza a más de 3 millones de personas al día, depende del comportamiento responsable de todos para operar de forma segura y eficiente.