Uno de los recintos más importantes de México y la CDMX es, entre otros, la Basílica de Guadalupe, la cual ha sufrido cambios a lo largo de su historia hasta llegar a ser el emblemático centro religioso que es actualmente.
Ubicada al pie del Cerro del Tepeyac en la Ciudad de México, la Basílica de Santa María de Guadalupe es mucho más que un simple edificio religioso, es un símbolo de la identidad mexicana, un lugar de peregrinación y un testimonio vivo de la historia.
El antiguo recinto Mariano —como también se le conoce— finalizó su construcción el 27 de abril de 1709, convirtiéndose en el cuarto templo de un conjunto de espacios dedicados a la imagen de la Virgen de Guadalupe por 267 años.
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Sin embargo, el paso del tiempo, los asentamientos y la gran cantidad de feligreses que llegan año tras año han obligado a que este centro religioso se vea en la necesidad de llevarla cambios estructurales significativos y aquí te contamos, cómo ha cambiado a lo largo de la historia.
¿Cuántos cambios ha sufrido la Basílica de Guadalupe?
A lo largo de su historia, este lugar ha sufrido diversas modificaciones, la primera de ellas generada por el paso del tiempo, que no perdonó la estructura y dejó un grave deterioro que agudizó su hundimiento, cuestionando su seguridad y ocasionando que se construyera un nuevo templo.
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Mientras que el lugar original se intentó reforzar y estabilizar sus cimientos, ya no le fue posible soportar el incremento de visitantes; sin embargo, aún se mantiene de pie bajo vigilancia.
Surge ‘La Nueva basílica de Guadalupe’
La Nueva Basílica de Guadalupe fue nombrada así para distinguirla del anterior templo, que ahora es llamado Templo Expiatorio de Cristo Rey. Situado al poniente del Atrio de las Américas.
De acuerdo con el Gobierno de la CDMX, la construcción comenzó en 1974 y tomó hasta el 12 de octubre de 1976 para su inauguración.
Basílica de Guadalupe: ¿Qué simboliza su forma?
La forma circular pretende simbolizar la carpa que alberga el Arca de la Alianza en su marcha por el desierto. La estructura circular de hormigón armado es lo único que sostiene el techo recubierto por láminas de cobre que han dado como resultado su característico color verde.
La nueva Basílica de Guadalupe es probablemente el lugar religioso más visitado en el mundo y recibe cerca de 30 millones de devotos y 10 millones de visitantes no religiosos cada año.