Tras la riña que se registró en el Reclusorio Oriente, el gobierno capitalino evaluará el caso para reforzar la seguridad en todos los centros que integran el sistema penitenciario de la Ciudad de México.
En conferencia de prensa, el jefe de Gobierno, Martí Batres reconoció que cuatro internos e igual número de custodios presentaron “algún tipo de afectación”.
No obstante, descartó que haya habido disparos de arma de fuego.
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“Hay cuatro personas privadas de la libertad con algún tipo de afectación y cuatro custodios, no tenemos reporte al menos hasta el momento que se haya dado una detonación de arma de fuego, nos señalaron que se pudo controlar rápidamente la situación y por supuesto que mañana en el gabinete haremos nuestro balance y veremos siempre cómo reforzar los mecanismos de seguridad de todos los órdenes en este caso en los reclusorios”, indicó.
El jefe del ejecutivo local refirió que la pelea fue entre dos grupos pequeños de internos, por lo que todo está bajo control.
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Asimismo, detalló que fueron cuatro individuos los que participaron de manera más activa en la riña.
“En realidad fue una riña que se dio ahí pues al calor de alguna discusión, fueron dos grupos muy reducidos por eso se controló rápidamente, no pasó a mayores, no tiene mayor implicación y afortunadamente todo tornó a la normalidad rápidamente. (¿Ingresó el equipo táctico negro?). Bueno ya la Secretaría de Seguridad Ciudadana parece que hay cuatro personas que participaron más intensamente en estos acontecimientos, pero afortunadamente está todo bajo control”.
Batres Guadarrama señaló que en los distintos centros de readaptación se han implementado diversos procesos de cambio y renovación del personal, aunado a que se trabaja en reincorporar actividades laborales y educativas, así como el encuentro con asociaciones religiosas y el reforzamiento de actividades culturales.