En México, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), que pertenece a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), se encarga de monitorear y emitir pronósticos sobre fenómenos climáticos, entre estos se encuentran los frentes fríos que se presentan con mayor frecuencia durante la temporada de otoño e invierno.
Esto significa que a partir de septiembre existe una prevalencia más alta de frentes fríos en México, especialmente entre noviembre y enero, cuando las masas de aire frío provenientes del norte del continente afectan con más intensidad diversas regiones del país, provocando descensos de temperatura, lluvias, vientos fuertes e incluso heladas en algunas zonas.
¿Cuántos frentes fríos habrá en octubre en 2025?
De acuerdo con la perspectiva y seguimiento de frentes fríos realizada por el SMN, en octubre de 2025 se espera que 5 frentes fríos ingresen México. Esta cifra es consistente con las previsiones de la temporada 2025-2026, periodo en el que se prevén un total de 48 frentes fríos distribuidos entre septiembre y mayo.
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El clima en México durante octubre se caracteriza por ser una etapa de transición entre la temporada de lluvias y el inicio del frío. En gran parte del país las precipitaciones comienzan a disminuir respecto a los meses anteriores, aunque todavía pueden presentarse lluvias intensas en zonas del sureste y el Golfo de México.
Por otra parte, la temperatura empieza a descender gradualmente, sobre todo en el norte y centro del país, donde ya se pueden percibir noches más frescas.
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Asimismo, octubre también marca el inicio de la temporada de frentes fríos por lo que, al menos conforme a los pronósticos se espera la llegada de 5 a lo largo del mes, condiciones que por lo general se caracterizan por provocar vientos fuertes, y descensos en la temperatura.
¿Por qué se origina un frente frío?
De acuerdo con el SMN, un frente frío se origina por el avance de una masa de aire frío y denso que desplaza por debajo a una masa de aire cálido, obligando a esta última a elevarse; si hay suficiente humedad, esto puede generar nubosidad, lluvias y tormentas eléctricas, además de una caída notable de la temperatura y cambios en la dirección del viento antes y después del paso del frente.