El 15 de septiembre suele estar marcado por fiestas, música y fuegos artificiales, pero este 2025 varias ciudades y municipios de México decidieron suspender sus festejos patrios. La decisión responde a tragedias recientes, episodios de violencia e incluso procesos políticos que impiden la realización de actos masivos.
En la mayoría de los casos, las autoridades locales confirmaron que se mantendrán los actos cívicos oficiales, aunque de forma sobria y con presencia de seguridad. En otros, la conmemoración quedará cancelada por completo.
¿Qué lugares cancelaron el Grito de Independencia 2025?
En Sinaloa, el gobernador Rubén Rocha Moya informó que por segundo año consecutivo no habrá espectáculos masivos ni presentaciones de artistas como Miguel Bosé, Marisela o El Coyote. En su lugar, solo se realizará un acto cívico con la participación de los tres Poderes y las Fuerzas Armadas.
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En la alcaldía Iztapalapa, Ciudad de México, se suspendieron las celebraciones tras la explosión de una pipa de gas LP ocurrida el 10 de septiembre, que dejó 13 muertos. La alcaldesa Aleida Alavez anunció que únicamente se llevará a cabo una ceremonia cívica sobria en la explanada.
El municipio de Xalatlaco, Estado de México, canceló todos los festejos después de la masacre en un tianguis el 4 de septiembre, donde cuatro personas murieron en un ataque armado. El ayuntamiento decretó 40 días de luto.
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En Oaxaca, seis municipios de distintas regiones no celebrarán el Grito: Zapotitlán Palmas, Santa María Yolotepec, La Reforma, Santiago Yosondúa, San Martín Itunyoso y San Juan Bautista Guelache. En algunos casos, la suspensión se debe a que las elecciones municipales aún no son validadas.
Por su parte, en Michoacán, las autoridades de Zinapécuaro, Peribán y Uruapan anunciaron la cancelación de las fiestas patrias debido a hechos violentos ocurridos en los últimos días, desde bloqueos carreteros hasta ataques armados contra policías locales.
Mientras en la mayoría del país las fiestas y conciertos se realizarán con refuerzo de seguridad, estas cancelaciones muestran un contraste. Este año, el Grito de Independencia estará marcado por decisiones difíciles que priorizan la memoria de las víctimas y la protección de la ciudadanía.