La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) realizó este miércoles su última sesión, luego de más de tres décadas de existencia.
Las ministras y ministros externaron su agradecimiento al personal del alto tribunal, así como el de sus ponencias. El ministro Jorge Pardo Rebolledo afirmó que, a pesar de los infundios, se retiran con la dignidad intacta.
“Me despido diciendo que, a pesar de los infundios y las calumnias, nos retiramos, algunos de nosotros, con la dignidad y la vocación intactos”.
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En tanto, el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá destacó que la maquinaria siempre funcionó.
“Durante muchos años la maquinaria funcionó, funcionó con el trabajo invisible y visible de cada una de las personas que colaboró en esta institución. Parafraseando a Cerati, solo me resta decir gracias totales a todos ustedes”.
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A su vez, la ministra Margarita Ríos Farjat lamentó la desaparición de las salas de la Corte.
“Lamento profundamente la desaparición de la Primera Sala que lleva décadas siendo histórica, pero confió en que su legado perdurara por siempre y siempre a la más alta protección de los derechos humanos”.
Por su parte, la ministra Loretta Ortiz Ahlf, presidenta de la Sala, destacó que la desaparición de estos órganos de la Corte, planteará nuevos retos.
“La desaparición de las Salas plantea retos institucionales, pero confió en que la nueva Corte sabrá afrontarlos. Inaugurando una época de justicia más abierta, incluyente y transformadora. Así cerramos un capítulo trascendente para dar paso a otro igualmente relevante, el de la legítima expectativa social de un Poder Judicial más democrático, accesible y comprometido con la justicia social”.
En esta última sesión, las ministras y ministros dejaron en el tintero asuntos como el amparo que interpuso el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya en el litigio que mantiene con la periodista Lourdes Mendoza, y el de prisión oficiosa, entre otros.
