La CURP biométrica como identificación oficial en el país es un hecho. En 2026 se convertirá en un documento solicitado para realizar actividades tan esenciales como inscribir a los niños al colegio o abrir una cuenta bancaria. Sin embargo, una duda inquieta a muchos mexicanos y esa es qué tan seguro será el resguardo de sus datos personales.
El nuevo documento oficial reunirá información importante de cada mexicana y mexicano, como lo son sus huellas dactilares, escaneo de iris y datos generales como la fecha de nacimiento o la entidad federativa a la que pertenecen. Convirtiéndose en un mapa único de identidad, por lo que el tema de la seguridad preocupa a más de uno.
¿Qué dice el gobierno sobre la seguridad de los datos?
Al respecto el Gobierno Federal expresó que el resguardo de los datos personales en la CURP biométrica será seguro. La información se guardará en servidores certificados y exclusivos del Registro Nacional de Población (Renapo), bajo la supervisión de la Secretaría de Gobernación.
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En cuanto al acceso a los datos, se afirma que estará restringido solo a personal autorizado, y cada consulta deberá estar justificada para trámites oficiales —como los relacionados con temas de salud, educación y seguridad social—.
Para reforzar la seguridad se ha prometido implementar medidas de seguridad avanzadas, como encriptación y registros de auditoría para saber quién accede a la información.
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¿Cuáles son las preocupaciones de expertos en tecnología?
A pesar de lo expresado por el gobierno, expertos en tecnología como R3D y Artículo-19 tienen varias inquietudes sobre la seguridad que tendrá el nuevo documento.
Entre ellas:
- Falta de regulaciones específicas. Aunque la Constitución protege la privacidad aún no existen leyes puntuales que garanticen el resguardo de los datos biométricos.
- Ausencia de auditorías externas. Las leyes actuales no contemplan auditorías externas ni protocolos públicos que garanticen la transparencia en el manejo de los datos.
- Datos de menores sin vigilancia externa. Una de las mayores preocupaciones es la acumulación de datos biométricos de niños, niñas y adolescentes, ya que la vigilancia externa es casi nula, especialmente porque el INAI (órgano garante de la transparencia) no cuenta con todos sus comisionados desde 2023.
- Mayor atractivo para cibercriminales: La centralización de todos los datos biométricos en un solo sistema aumenta el riesgo de que ciberdelincuentes intenten robarlos.
El miedo a que esto ocurra no es fortuito, ya que en 2024 se dio una filtración masiva de datos médicos y biométricos del ISSSTE, lo que evidenció la debilidad del país en temas de ciberseguridad.
El panorama sobre la CURP biométrica aún es complejo, especialmente , luego de que en conferencia de prensa la presidenta Claudia Sheinbaum expresará que no será obligatoria, pero que el gobierno la impulsará para ayudar en diferentes temas.