La presidenta Claudia Sheinbaum celebró que el gravamen a las remesas se haya ajustado de 3.5 a 1.0 por ciento en el proyecto de ley “grande y hermoso” del presidente Donald Trump que fue presentado en el Senado de Estados Unidos.
En la conferencia matutina de este lunes, la titular del Ejecutivo consideró que se trata de un logro de los connacionales que enviaron cartas a los congresistas estadounidenses, así como de la labor que hicieron los senadores con sus pares en el vecino país del norte.
“Hay, yo diría, logros muy importantes y ese logro es de nuestros paisanos y paisanas principalmente por el envío de cartas a su senadores, sobre todo aquellos que tienen la doble nacionalidad, que fue algo que se impulsó y llegaron muchísimas cartas de las y los senadores que fueron a a visitar a senadores de Estados Unidos, para pedir pues que no hubiera impuesto a las remesas. ¿Cómo queda la redacción? queda 1%, pero solamente para las remesas que se envían en efectivo, todas las transferencias electrónicas tienen 0% de impuesto”, expuso.
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Sheinbaum adelanta proyecto para que mexicanos no se vean afectados por el 1%
La mandataria federal aseguró que el impacto de este impuesto a los envíos de dinero en efectivo que hagan los migrantes es menor debido a que sólo el 1 por ciento de los mexicanos en ese país, según datos del Banco de México, hacen este tipo de operaciones.
No obstante, adelantó que su administración está en espera de la aprobación del proyecto para que en caso de que así sea, los mexicanos que se vean afectados con esta disposición les sea reembolsado el impuesto a través de la Financiera para el Bienestar (Finabien).
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“Para todos aquellos que lo hicieran en efectivo y que pudieran recoger aquí a través de esa tarjeta, pues se devolvería el 1%, no es mucho dado que es el 1%, entonces es el 1% del 1%, entonces estaré hablando, pues de menos en total de 5000 millones de pesos, mucho menos que eso”, indicó.
Inicialmente el proyecto aprobado por la Cámara de Representantes contemplaba un impuesto de 5% sobre las remesas, luego el Senado lo redujo al 3.5%, y por último lo dejó en 1%. De acuerdo con el Comité de Finanzas del Senado estadounidense, el gravamen será vigente a partir del 31 de diciembre de 2025, pero se aplicará únicamente a remesas físicas: efectivo, giros postales, cheques de caja u otros instrumentos no bancarizados.