El Congreso de la Ciudad de México aprobó hacer incorporaciones al Código Penal local para castigar nuevas formas de violencia que están siendo denunciadas tal es el caso de los pinchazos en el Metro, pero no solo eso, también la adulteración de bebidas y alimentos así como la aplicación dérmica o subcutánea.
De esta forma se aprobó la iniciativa en la materia enviada de manera preferente por la jefa de Gobierno Clara Brugada y con agregados de la diputada priista Tania Larios.
El presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, el morenista Alberto Martínez Urincho explicó que de esta forma se responde a la generación de herramientas para enfrentar estas agresiones recientemente denunciadas.
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“Por eso se propone incorporar un nuevo capítulo denominado administración subrepticia de sustancias el delito que se plantea responde a prácticas contemporáneas de violencia que implica la administración clandestina de sustancias, pero no solo por los pinchazos sin consentimiento de la víctima, si bien los casos más recientes, plantean los pinchazos también existen otras formas de administra subrepticia con como la adulteración de bebidas y alimentos o el empleo de aplicación n dérmica o dispositivos e tipo subcutáneo”.
Luego que en dos meses de unas cuantas denuncias se ha incrementado a 120 casos denunciados en distintos espacios públicos, principalmente el Metro, el Gobierno local presentó la iniciativa para fortalecer la respuesta del estado frente a estas nuevas formas de violencia y asegurar entornos seguros.
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Por el PAN la diputada Olivia Garza, no dejó de recordar que ellos fueron los primeros que denunciaron estos ataques,que fueron ignorados por el partido en el poder hasta que se vio rebasado.
“Esto es el mejor ejemplo de cuando la realidad te obliga, por más que te aferres a negar algo, a reconocer y a actuar. Hoy estamos legislando este delito, porque con conferencias difamando a la oposición y estrategias de comunicación Morena no pudo evitar que los casos continuarán lamentablemente y sí, quiero dejarlo claro, hoy estamos legislando este delito, porque la parte mayoritaria fue obligada a hacerlo ante el crecimiento de los casos”.
La coordinadora de Morena, Xóchitl Bravo, rechazó estas versiones al asegurar que desde el inicio el Gobierno local dispuso acciones con mas de 5 mil 800 elementos de seguridad en el transporte público, asistencia psicológica y jurídica en caso de que presente el incidente, así como revisiones aleatorias, y ahora al Congreso le toca otorgar las herramientas para que la autoridad actúe.
Las adiciones imponen una pena de dos a cinco años de prisión y de cincuenta a trescientos días multa, a quien, sin el consentimiento de una persona, le administre, introduzca, suministre o aplique cualquier sustancia, de manera subrepticia, oculta o mediante engaño.