La Ley de Asistencia Social en el país debería incluir entre sus disposiciones, la obligación de la autoridad de informar de manera clara sobre la salud sexual, reproductiva y menstrual a todas las personas en el país, planteó la integrante de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la Cámara de Diputados, Marisela Zúñiga.
La congresista indicó que es necesario eliminar las barreras que impiden a las niñas, adolescentes y mujeres ejercer una menstruación digna, así como acceder a información oportuna en la materia, ajena a estigmas y tabús que aún existen en México.
Propuso reformas a la norma en cuestión, para establecer que las autoridades en la materia deberán “proporcional de manera profesional la información y orientación efectiva en materia de salud sexual, reproductiva y menstrual”.
Te podría interesar
Menstruación digna
En su argumentación, la congresista indicó que históricamente, las mujeres han sido discriminadas, descalificadas, estigmatizadas, relegadas e incluso criminalizadas por menstruar.
Recalcó que en la antigua Roma se consideraba que las mujeres en menstruación, padecían enfermedades como imbecilidad e histeria; y en otras civilizaciones se les catalogaba como “impuras”.
Te podría interesar
Al recalcar que la menstruación sigue siendo en muchas sociedades actuales un tema tabú, destacó las complicaciones históricas, sociales, culturales y económicas en torno a un proceso biológico en torno al cual, persiste la discriminación y la falta de información.
“Si bien ya hay leyes que salvaguarden a las mujeres, también es un hecho que todavía faltan políticas públicas en materia de asistencia social para apoyar a todas aquellas que por la situación social de desventaja en las que se encuentren son vulnerables y sufren afectaciones, las cuales no les permiten el pleno disfrute de sus derechos fundamentales y caen en una desigualdad estructural”, anotó.
Indicó que de acuerdo a la ONU Mujeres, en el mundo millones de niñas, adolescentes y mujeres, así como “personas menstruantes” no tienen acceso a información oportuna sobre el proceso biológico que se presenta mensualmente y tampoco cuentan con la capacidad económica de adquirir productos menstruales, utilizar instalaciones de agua y saneamiento para gestionar su menstruación.
Refirió que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la UNICEF, han dado cuenta de que una de cada cinco adolescentes en regiones rurales de Etiopía no utiliza productos de gestión menstrual; y en las áreas urbanas, una de cada 20 mujeres no puede contar con los insumos necesarios para ello.
Ello significa, indicó, que la pobreza económica asociada a los estigmas existentes, la falta de información sobre el inicio, desarrollo, características, duración y gestión menstrual, así como falta de agua e instalaciones de saneamiento, afectan a las mujeres en todo el mundo.
Por ello, abundó la promovente, es necesario abordar la problemática desde distintos frentes y uno es el de informar oportunamente a la población, en especial a quienes pudieran estar en riesgo por la falta de recursos, conocimientos y oportunidades para una adecuada gestión menstrual.
“Que ya no existan barreras para poder ejercer una menstruación digna, con insumos de gestión menstrual, así como, la información necesaria donde su salud no se vea deteriorada por alguna enfermedad o un mal cuidado. Todas estas acciones, a través de asistencia social, encaminadas a llegar a la población más vulnerable, para quienes viven su menstruación, ésta sea de una manera segura e informada, eliminando los tabúes y estigmas que se siguen creyendo sobre el tema”, solicitó.