El Senado de la República avaló la Estrategia Nacional de Seguridad Pública 2024 - 2030, que -entre otras cosas- establece el fortalecimiento de los trabajos de inteligencia, investigación, coordinación y evaluación en el combate a la delincuencia.
Tras la comparecencia (en privado) del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, los senadores discutieron la Estrategia presentada por el funcionario, la cual no dejó de recibir críticas, a pesar que fue respaldada por el PAN y Movimiento Ciudadano.
Desde la tribuna, el senador por el PAN, Francisco Ramírez Acuña, anticipó su voto a favor de la Estrategia, aunque advirtió que tiene muchas carencias y deja muchas dudas en temas como las cifras oficiales que, dijo, muchas veces parecen ser maquilladas para negar la realidad.
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Indicó que el documento parece un “rosario de buenas intenciones”, por lo que aclaró que no están entregando un cheque en blanco al secretario de Seguridad, sino que le están dando su apoyo para que se hagan bien las cosas.
En tanto, el senador por el PRI, Miguel Riquelme, advirtió que la Estrategia Nacional de Seguridad sólo implica una repetición de los errores del pasado y no soluciona nada, por lo que, dijo, debe ser replanteada por completo.
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Por su parte, el coordinador de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, destacó que, aunque se muestra un cambio de paradigma, la Estrategia no aborda a profundidad problemas como el fenómeno de las desapariciones.
La Estrategia Nacional de Seguridad Pública, aprobada con 105 votos a favor, 16 en contra y una abstención, se remitió al Ejecutivo Federal para su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
