La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel Mossa, sostuvo un encuentro con magistradas y magistrados de los Tribunales Colegiados del Primer Circuito en materia penal, donde reiteró la importancia de fortalecer la coordinación interinstitucional como eje para consolidar un Poder Judicial unido y sólido.
Acompañada por Sergio Javier Molina Martínez, director general de la Escuela Nacional de Formación Judicial, Esquivel Mossa destacó la labor de los operadores del sistema penal, quienes —subrayó— desempeñan una función esencial para garantizar un México más justo.
Durante la reunión, la ministra reconoció que el derecho penal es una de las áreas más sensibles y complejas dentro del ámbito jurídico, por lo que exige a magistradas y magistrados actuar con prudencia, claridad y un compromiso permanente con las personas cuyos casos analizan.
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Coordinación interinstitucional en el Poder Judicial: la clave para decisiones sólidas y constitucionales
Esquivel Mossa enfatizó que la coordinación entre instituciones es indispensable para consolidar al Poder Judicial y asegurar que sus decisiones se mantengan apegadas a la Constitución. Señaló que esta unión institucional permite enfrentar los retos actuales en materia penal y fortalecer la credibilidad de las resoluciones judiciales.
Asimismo, reiteró su llamado a mantener una comunicación constante entre órganos judiciales y académicos, con el fin de fortalecer la formación, el criterio jurídico y la capacidad operativa del sistema penal.
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Un sistema penal eficiente y cercano a quienes enfrentan violaciones a derechos humanos
La ministra pidió a magistrados y magistradas abrir las puertas de la justicia a todas las personas, sin distinción, especialmente a quienes han sido víctimas de violaciones a sus derechos humanos. Subrayó que el Poder Judicial debe responder de forma eficiente, sensible y oportuna, garantizando el acceso pleno a la justicia.
Esquivel Mossa destacó que su labor es fundamental para construir un sistema de justicia fuerte, donde cada resolución tenga como eje la protección de los derechos humanos y el fortalecimiento del Estado de derecho.
Durante el diálogo, también reconoció el compromiso de los magistrados del Primer Circuito y su contribución para mantener un equilibrio entre la técnica jurídica, la vocación de servicio y la responsabilidad social que exige la materia penal.
