La Presidencia de la República, a través de las secretarías de Hacienda y Economía, debería tomar las medidas pertinentes para extender cinco años más el decreto que regula la importación definitiva de autos usados provenientes principalmente de Estados Unidos, planteó el integrante de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la Cámara de Diputados, Fernando Castro.
El legislador solicitó que la Cámara respalde su petición al Ejecutivo Federal, formulada a partir de un punto de acuerdo.
El decreto por el que se regula la importación definitiva de vehículos usados y que entró en vigor desde noviembre de 2024, debería tener una ampliación, consideró Castro Trenti.
Te podría interesar
El expriísta recordó que en el contexto del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, TLCAN por sus siglas, se establecieron y se fueron actualizando en el transcurso de los años, disposiciones en materia de importación de autos usados de Estados Unidos y Canadá.
Prórrogas a la importación de autos “chocolate”
Por medio de distintos decretos, indicó, esas normas han tenido ajustes y actualizaciones, con el fin de mantenerlas en vigor.
Te podría interesar
Indicó que en diciembre de 2020, se extendió la vigencia de la norma hasta el 30 de septiembre de 2024, con el fin de dar certeza a los importadores y propietarios de los vehículos.
También, con el propósito de mantener control sobre esas unidades y verificar que ingresaran al país de manera legal.
Precisó que el decreto establecía distintas condicionantes para permitir la entrada de vehículos usados de Canadá y la Unión Americana, así como facilidades fiscales y administrativas.
En la actual administración, el último decreto en la materia permanecería vigente hasta el pasado 5 de noviembre de este 2025, anotó.
En consecuencia, indicó el legislador, agentes aduanales vendedores de autos usados e importadores, esperan que se autorice una nueva prórroga a las reglas en cuestión.
No extender la aplicación de esas disposiciones “implicaría el retorno a un esquema más costoso y restrictivo para la importación de vehículos usados, afectando tanto a las familias que recurren a este tipo de bienes como al comercio formal que los introduce conforme a la ley”, señaló.
Calificó como urgente y necesario ampliar la vigencia del decreto existente, para seguir implementado medidas que den seguridad jurídica a importadores, propietarios de los vehículos “chocolate”, evitar un impacto económico severo para quienes utilizan esas unidades con fines familiares, personales, laborales y económicos.