La reciente intercepción de la Global Sumud Flotilla por parte de la Armada israelí, iniciado la noche del miércoles cuando las embarcaciones se encontraban a unas 74 millas náuticas (aproximadamente 137 kilómetros) de la costa, ha llamado la atención a nivel internacional.
En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Sol González Eguía, mexicana integrante de la Flotilla Global Sumud y Diego Vázquez Galindo, dos activistas mexicanos a bordo, compartieron sus experiencias tras la detención de su embarcación, poniendo de relieve la grave situación humanitaria en Gaza. "Nos rodearon y nos lanzaron agua que causaba irritación en los ojos y la piel", compartió Sol al describir el momento de la detención.
A pesar de estar preparados para una posible intervención, vivieron una pesadilla. En su relato, también mencionó el crucial papel de la solidaridad en tierra: "Nunca dudé en que el apoyo en tierra sería fundamental para nuestro regreso".
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¿Cómo fue el despliegue Militar?
Diego, quien se encontraba en otro barco menor, relató un ataque diferente. "Un buque de guerra llegó solo para detener a seis personas que llevaban ayuda humanitaria. El despliegue era abrumador", enfatizó.
En su narrativa, resaltó los intentos de intimidación durante su detención, donde un soldado cortó una manguera para hundir su barco como parte de una táctica de amedrentamiento. Sin embargo, ambos reconocen el privilegio que tienen al ser de países con más poder. "Nuestro sufrimiento fue pequeño comparado con lo que viven los palestinos. Ellos carecen de protección y de atención mediática", subrayó Sol, instando al público a no perder de vista la razón de su lucha: el genocidio en Gaza.
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Diego declaró: "Si nuestros gobiernos no toman medidas para detener el genocidio, habrá más flotillas. Estoy dispuesto a regresar siempre que sea necesario".
Esta determinación resuena con fuerza, reflejando el compromiso de seguir adelante por la justicia. Con estas valientes voces, la historia de Gaza no se desvanece.