El dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, afirmó que México enfrenta un retroceso democrático, el cual se hace evidente cuando una sola fuerza política, como es el caso de Morena y sus aliados, amedrenta y soborna a algunos senadores para sacar adelante la reforma judicial.
Recordó que uno de los logros de la reforma constitucional de 1996 fue el acuerdo de que México tuviera su primera Cámara de Diputados sin la hegemonía del partido en el gobierno.
Cortés Mendoza dijo que a partir de ese momento se sabía que una reforma constitucional que no fuera apoyada en un acuerdo amplio que incluyera a la oposición, no tenía viabilidad.
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Indicó que esta semana será crucial “porque o escuchamos a las organizaciones, académicos, especialistas en derecho, magistrados y jueces” que se han manifestado en contra de dicha modificación constitucional “o de lo contrario caeremos en un régimen autocrático”.
Advirtió que, de pasar la iniciativa impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se generará una mayor tensión diplomática con Estados Unidos y Canadá, menor inversión y mayor desempleo, una disminución en la calificación crediticia del país, mayor devaluación del peso, sanciones internacionales y la disminución de la confianza país.
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Por ello, demandó la implementación de un parlamento abierto para la discusión de una verdadera e integral reforma al sistema de procuración de justicia.