El peligro de la sobrerrepresentación que el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y aliados se quieren adjudicar con “trampas” en la Cámara de Diputados, está en que, con una mayoría artificial, podrán cambiar la Constitución “como se les dé la gana”, advirtió la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el recinto.
El coordinador Rubén Moreira y el vicecoordinador Marco Antonio Mendoza, señalaron que la oposición también podría quedarse sin la posibilidad de impugnar leyes y decisiones gubernamentales ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Calificaron como “una trampa” los argumentos del bloque oficialista, para justificar su intento de quedarse con más del 74 por ciento de la Cámara de Diputados, cuando la votación que obtuvieron en las urnas el 2 de junio, fue más del 50 por ciento, no del 70 por ciento.
Te podría interesar
En una transmisión especial de su programa en la plataforma YouTube, “con peras, manzanas y naranjas”, Moreira Valdez fue enfático en advertir sobre los efectos que podría tener la sobrerrepresentación morenista en el Congreso.
“La primera consecuencia es que Morena sin tener la voluntad popular puede cambiar la Constitución, ahí se está equivocando Morena, eh, por eso luego pasan cosas muy graves. Quiere apropiarse de unos diputados, pero no tiene el soporte de la voluntad de la gente, con esos diputados va a querer cambiar la Constitución como lo quiere hacer ahorita, pero México no les autorizó eso”, remarcó.
Te podría interesar
“Y alguien puede decir: vale madre, ¡no, no, así empiezan las crisis nacionales, eh!”, sentenció.
Pidió tener muy presente que si el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que tienen en sus manos la asignación final de diputaciones y senadurías plurinominales o de representación proporcional, avalan las exigencias del morenismo, también estarán en riesgo.
Recordaron que el Ejecutivo Federal y la mayoría en el Legislativo están sobre la reforma al Poder Judicial para adueñarse de éste y en ello, va involucrado el Tribunal Electoral.
Y si los magistrados electorales dejan pasar la sobrerrepresentación, ellos también “van a desaparecer”, les advirtió.
Minorías y ciudadanos indefensos
Moreira Valdez agregó que permitir a grupos políticos que hagan “lo que quieran” con las leyes, la minoría en el Legislativo no podría promover acciones legales para revertir reformas regresivas y la ciudadanía quedaría indefensa con la aplicación de leyes arbitrarias que atropellan derechos, pero no se han dado cuenta de ello.
“Que las minorías al no estar representadas no se pueden oponer a leyes inconstitucionales, una cosa es la Constitución y otra cosa son las leyes (…) Bueno, ya saben, ustedes votaron por unos y les quieren dar los diputados al otro. Imagínate, la gente no se da cuenta de lo que puede suceder: te pueden cambiar el Código Civil para expropiarte tu casa y no va a haber quién te defienda”, advirtió.
En compañía del diputado Marco Antonio Mendoza, así como el exdiputado federal Miguel Sulub y el exfuncionario federal y economista, Mario Di Costanzo, el líder priísta en San Lázaro, se pronunció contra el intento del partido oficialista y sus aliados de controlar el Congreso de la Unión por completo.
Los participantes en la transmisión, coincidieron en señalar que el artículo 54 de la Constitución, plantea que ningún partido político puede sobrepasar la representación en el Legislativo, más allá del 8 por ciento.
Sin embargo, se está planteando una interpretación “tramposa” de esa norma, en el intento de que, a cada partido de su coalición, se le conceda la sobrerrepresentación señalada.
Aunque reconocieron que las reformas electorales del 2014 tuvieron un mal diseño y el bloque mayoritario pretende aprovechar eso para adjudicarse curules que no ganaron en las urnas, recalcaron que, en ese momento, los cambios aprobados tenían otro fin.
Se pretendía evitar que aliados se “traspasaran” los votos obtenidos con el fin de evitar la desaparición de los partidos que no pudieran mantener su registro oficial, al no obtener la votación mínima reglamentaria.
El “fraude” de la sobrerrepresentación, agregaron, se comenzó a fraguar al hacer pasar como integrantes de los partidos aliados a sus candidatos, para reclamar como suyo el porcentaje de votación involucrado y así, acceder a más espacios plurinominales en el Congreso, dijeron.
En esos términos, el discurso del bloque mayoritario, respecto a que “el pueblo” les dio el poder “reformador” de la Carta Magna y el resto de las normas en el país, agregaron, es engañoso.