La Unión Nacional de Padres de Familia considera que la eliminación de la prueba COMIPEMS no resuelve el problema de rezago educativo y la falta de oportunidades para acceder al siguiente escalón académico.
Explicó que la prueba COMIPEMS permite que las instituciones educativas puedan evaluar los conocimientos y habilidades básicas que los estudiantes adquieren en la primaria y la secundaria y queda muy lejos de provocar “rechazados”, al contrario, promueve una organización para que los alumnos que aspiran a continuar su educación media superior obtengan un lugar, dentro de un bachillerato de acuerdo a las habilidades adquiridas.
Como respuesta a la postura de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo y del próximo Secretario de Educación, Mario Delgado Carrillo de desaparecer la prueba COMIPEMS advirtió que eliminarla sin una estrategia clara, no da una certeza de la educación que puedan recibir o complementar los estudiantes en estos niveles.
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El no tener los espacios suficientes en el sector público, adicional al problema que enfrentan las instituciones privadas de índole económico, son las verdaderas causas por el cual cientos de miles de jóvenes optan por no ingresar a estos niveles de grado escolar.
En este sentido, la UNPF dio su punto de vista a partir del año 2020, sobre la improvisación del nuevo modelo de escuela mexicana, la ilegalidad de los libros de texto y sus planes y programas, aunado a los retos que enfrentan los estudiantes ante el rezago educativo post pandemia.
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Finalmente, desde la Unión Nacional de Padres de Familia, hicieron un llamado a las autoridades educativas federales próximas a asumir su cargo, para que tomen conciencia de la importancia que tiene para los padres garantizar la mejora y continuidad de una educación media superior, con mejores instrumentos de evaluación y un adecuado diagnóstico y planeación del sector educativo, con miras a que verdaderamente garantizan el acceso a la educación para todos.