La iniciativa de los diputados del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que prevé tomar los ahorros de cuentas inactivas de trabajadores del IMSS y el ISSSTE, será impugnada ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), advirtió la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados.
Si el proyecto de crear un Fondo de Pensiones para el Bienestar es aprobado en San Lázaro y también en el Senado de la República y toca el patrimonio de los trabajadores, será impugnado, anticipó el coordinador parlamentario del tricolor, Rubén Moreira.
Sentenció que su partido votará contra el uso de los recursos de las cuentas de ahorro de los trabajadores, en un Fondo de Pensiones como el que promueve la mayoría en el recinto parlamentario y que el Presidente de la República ha pedido apresurar.
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“Seguramente los diputados presentaremos una acción de inconstitucionalidad y ayudaremos a los trabajadores a que se defiendan”, subrayó.
Millones de cuentas, miles de millones de pesos
Durante la transmisión de su programa en la plataforma Youtube, la noche de este sábado 13 de abril, el líder de los priístas recordó que las cuentas de las que Morena quiere echar mano, identificadas como inactivas, luego de que los trabajadores del IMSS cumplan 70 años y los del ISSSTE, 75 años, reúnen 40 mil millones de pesos.
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Acompañado por el vicecoordinador de la fracción, Marco Mendoza y el exfuncionario y exlegislador federal, Mario Di Costanzo, Moreira Valdez sentenció que la propuesta original de los morenistas era “quedarse con todo” lo acumulado en las cuentas de los trabajadores de más de 70 años.
Trabajadores indefensos
Sentenciaron que el proyecto señalado, no establece ningún mecanismo de protección por parte de los propietarios del recurso, al cual calificaron como “privado”, más que las reclamaciones de las que habla el documento.
Calificaron como violatoria de derechos laborales la propuesta del coordinador de la bancada de Morena, Ignacio Mier y su compañera Ivonne Cisneros.
En particular, el diputado Moreira expresó su preocupación respecto a que los recursos a enviar al Fondo de Pensiones en cuestión, podrían ir a parar a “obras monumentales”.
También enfatizó que por tratarse de reformas a leyes secundarias, la mayoría morenista las puede aprobar sin requerir de mayoría calificada, por lo que será necesario alistar medidas legales para contrarrestarlas.
Se manifestó a favor de que los trabajadores en México reciban pensiones completas, “al 100 por ciento”, pero la vía propuesta por el diputado Mier Velazco no es la adecuada.
Recordó que la ley en materia de seguridad social prevé que ante el fallecimiento de un trabajador, sus beneficiarios pueden reclamar los recursos de su pensión de manera legal.
Beneficiarios, “vayan por su dinero”
Hizo un llamado a la población a que busque asesoría y si sus familiares titulares de pensiones del IMSS o el ISSSTE fallecieron, acudan a reclamar “su dinero”.
Asimismo, pidió a los líderes de las organizaciones sindicales “protestar” porque el bloque mayoritario en el Congreso quiere despojar a “los más pobres” de su dinero, producto de su propio trabajo o de sus familiares.
Moreira, el diputado Mendoza y el especialista Di Costanzo recalcaron que la iniciativa del diputado Mier Velazco es la vía alterna a la iniciativa de reforma constitucional presentada por el Presidente de la República en materia de pensiones y en la que ofreció pago “total” a quienes ya hicieron sus aportaciones al IMSS o el ISSSTE, con un tope de 16 mil 400 pesos.
Aclararon que ese planteamiento no beneficiaría a todos los trabajadores del país, como se prometió en los discursos, sino a los mayores de 70 años, con 750 semanas de cotización y cuyas pensiones fueran menores al sueldo mínimo base.
Fondo inviable
También señalaron que al percatarse de que los fondos planteados en la iniciativa presidencial, no serán suficientes e incluso son inviables, Morena plantea ir por los ahorros de los trabajadores para capitalizar su propuesta.
Enfatizaron que inicialmente, se pretendía obtener recursos para pagar pensiones “completas”, de la liquidación del organismo Financiera Rural, y de remanentes generados por la operación de aeropuertos y trenes administrados por el Ejército, como el Tren Maya, pero no se trata de dinero disponible, porque hasta el momento, esos proyectos no han generado ganancias, sino que siguen subsidiados por el Estado.