La Jueza Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales, con sede en el estado de México, Raquel Ivette Duarte Cedillo, dictó auto de formal prisión en contra de los ocho militares ligados con el caso Ayotzinapa, por la desaparición de 43 estudiantes normalistas.
La autoridad judicial consideró que las pruebas aportadas por la Fiscalía General de la República (FGR) son suficientes para iniciarles proceso por el delito de delincuencia organizada.
La defensa de los acusados sostuvo que no existen elementos sólidos para presumir la responsabilidad de los ocho militares en este caso.
La juzgadora instruyó que los inculpados enfrenten el proceso con privación de la libertad, por lo que seguirán presos en el Campo Militar 1-A, en Ciudad de México.
Los implicados cuentan con un plazo de no más de 10 días para presentar una apelación e intentar revertir la formal prisión.
El viernes pasado, agentes de la Policía Federal Ministerial (PFM) concretaron las órdenes de aprehensión en contra de los ocho militares.
Fuentes federales informaron que el jueves de la semana los ocho inculpados se entregaron voluntariamente y las órdenes de aprehensión las efectuaron elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM).
Habían recobrado su libertad, en virtud del cambio de medida cautelar que los obligaba a presentarse firmar periódicamente y entregar su pasaporte, así como la entrega de una garantía económica.
Esto, con la finalidad de llevar el proceso en libertad por el delito de desaparición forzada, sin embargo, una vez fuera de prisión, la FGR emprendió una segunda acción legal por delincuencia organizada, delito considerado grave.
@amarilloalarcon