Se incrementó el número de visitantes a la Basílica de Guadalupe y los caminos se observan con presencia de peregrinos, así como los diferentes accesos carreteros.
A esta hora llegan por todos lados… muchos lo hacen a pie, corriendo, en bicicleta, solos o en grupo, en motocicleta, mototaxis, carros, autobuses, camiones y en camionetas.
Daniel lo hizo en bicicleta y mientras avanzaba sobre la autopista México - Puebla pensaba en el agradecimiento que haría por la pareja que ahora lo acompaña.
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“Vengo a todo vapor a dar gracias a la virgencita para agradecer que ya tengo una compañera, se lo pedí y ya la tengo y es momento de agradecerlo y que nos cuide a todos”, afirmó.
La extensa Calzada de Guadalupe se saturó de miles de fieles devotos que avanzan con complicación para acceder por el puente papal y llegar al atrio y posteriormente a los pies de la Virgen Morena.
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Así lo hicieron Luis y su esposa Susana, provenientes de Veracruz.
“Venimos a cumplir una manda con nuestra madre Lupita y le pedimos el apoyo que siempre nos ha brindado que nos siga cuidando, principalmente a mi hija que nos siga apoyando como siempre lo ha hecho, que nos saque adelante: evitar problemas. Mi hija tiene tres años, tres años la trajeron, este es el tercer año, esa fue la promesa que si me permitís venir tres años, iba yo entrar hincado y pues aquí estamos cumpliendo”, destacó.
Llegan cansados al santuario guadalupano, con sed, con los pies hinchados y con ampollas, algunos otros con molestias propias del cansancio, pero con mucha devoción para estar un año más frente a la llamada “patrona de los mexicanos”.
Las avenidas circundantes a la Basílica de Guadalupe se saturaron de feligreses que intentan llegar para entonar a las 23:00 horas las mañanitas y después, regresar a sus lugares de origen.
Mientras, calles y avenidas siguen con presencia de la feligresía que dan una estampa de devoción y fidelidad a la Virgen que cumple 493 años de su aparición en el cerro del Tepeyac frente al ahora santo Juan Diego.
@amarilloalarcon