La reforma que reducirá la jornada laboral de 48 a 40 horas debe contemplar que el trabajador recibirá pago por siete días, tal y como aplica en otros países que ejercen mejores prácticas económicas, demandó el líder parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira.
El legislador llamó a que el proyecto que la mayoría en el recinto ha afirmado será prioridad en el actual periodo ordinario de sesiones, se modifique y se ponga a discusión a la brevedad, en el Pleno.
Pidió tomar como ejemplo prácticas laborales y económicas en beneficio de los empleados, que contemplan el pago de siete días de trabajo por cinco días efectivos, así como dinámicas distintas en el sector comercial para evitar que la reducción de la jornada laboral afecte la productividad y ganancias de las empresas.
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“En otras partes del mundo, queda el sábado y el domingo libres y te pagan los siete días. Entonces qué hacen en algunas partes del mundo, por ejemplo los supermercados, los grandes supermercados no abren los domingos, porque la gente puede ir el sábado a surtir su comida. Acá eso no puede suceder porque mucha gente trabaja en sábado, y en domingo dejas que las tiendas de barrio abran, y eso compensa y se hace una mejor práctica comercial”, ejemplificó.
Discutir ya las 40 horas
En la transmisión de su programa en la plataforma YouTube, “Con peras, manzanas y naranjas”, Moreira Valdez refrendó el llamado a retomar de inmediato el dictamen existente, aprobado en la pasada Legislatura a propuesta de la diputada exintegrante de Morena, Susana Prieto.
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Agregó que instancias empresariales en el rubro de servicios y turismo han propuesto que la reducción de la jornada laboral sea gradual, aplique primero en la industria y posteriormente en otro tipo de negocios, y el PRI está de acuerdo con ello.
Insistió en que el dictamen aprobado por los anteriores diputados y que permanece en la Mesa Directiva, debe ser retomado y modificado incluso en la discusión en el Pleno, pero eso debe suceder a la brevedad.
“Revisar, que podemos buscarle gradualidad. La Cámara Nacional de Comercio planteó algunas medidas para hacerlo gradual, pero ya empecemos. Que los trabajadores de las minas, nomás trabajen de lunes a viernes. A ver, en las minas se han hecho millones y millones de fortuna, yo creo que hay que hacerlo ya inmediatamente en esas empresas y en otras, puede ser gradual, pero a los dos o tres años ¿verdad?, y puede haber apoyos fiscales”, recomendó.
Otra industria donde la reforma podría implementarse de lleno, agregó, podría ser la automotriz, abundó.
El líder de los priistas en San Lázaro insistió en que la productividad y competitividad de las empresas en el país no se vería afectada, si la reducción de la jornada laboral va acompañada de estímulos fiscales, en especial para las principales generadoras de empleos, que son las micro, pequeñas y medianas empresas.
Añadió que la reforma podría convertirse en un círculo virtuoso, ya que con dos días de descanso garantizado, el trabajador dejaría de gastar en pasajes y comida para ir al trabajo y regresar, y podría utilizar sus recursos para consumir con su familia, lo que será benéfico para su vida familiar y personal.