Al recriminar que en los últimos seis años, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, CNDH ha favorecido a Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) en 12 quejas por violaciones graves a los derechos humanos en Nuevo Laredo, Tamaulipas, remarcó el Comité de Derechos Humanos de esa región fronteriza.
El titular del Comité, Raymundo Ramos Vázquez señaló que víctimas y defensores humanitarios en Nuevo Laredo “estamos bien ofendidos por siquiera pensar en una reelección de María del Rosario Piedra Ibarra”; la suya “ha sido de las peores administraciones que ha habido en su historia. Con estos 12 casos que cerraron sin responsabilidad a las Fuerzas Armadas, evidenciamos que hay una sumisión al Ejército y a la Marina, que no hay investigación de fondo y que se limitan a hacer una valoración de juicio por escrito”, agregó.
“Las víctimas son abandonadas por la Comisión Nacional, que aseguran su publicidad, defienden al pueblo. Con 12 casos reales, que el Senado de la República tenga un poco de juicio, de empatía con las víctimas y asuma una postura crítica. No para aplaudir a la presidenta de la CNDH, ella debería estar rindiendo cuentas. A los senadores, al pueblo de México y a las víctimas sobre todo”, recalcó Ramos Vázquez.
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Al reducir el presupuesto de la CNDH, la presidenta se jactaba de que ‘hicieron más recomendaciones con menos presupuesto’, ¡eso no es cierto!. Las recomendaciones que hicieron no llegan a nada. En el tema de la reparación integral, no se repara. Las recomendaciones por violaciones graves a los derechos humanos que ha habido en Nuevo Laredo, Tamaulipas, no han servido de mucho porque siguen ocurriendo masacres y muertes arbitrarias de civiles inocentes y no es con capacitación en derechos humanos como los militares van a cambiar de hacer uso excesivo de la fuerza, es con sanciones, es con juicios, es con cárcel como van a cambiar.
Piedra Ibarra “debería por decoro, por dignidad, renunciar a su aspiración de presidir la CNDH. La actual presidenta no le sirve el país, no le sirve el Senado y no creo que le ayude mucho a la doctora Claudia (Sheinbaum, presidenta) Por lo tanto, Piedra Ibarra debería retirarse a lo que le quede, a otras cosas: la defensa de los derechos humanos no es el fuerte de María del Rosario, Piedra Ibarra, fue una administración comparsa del abuso del poder desde las Fuerzas Armadas. Fue una administración que estuvo en silencio. A la fecha sigue sin pronunciarse por la muerte de la niña Lidia Iris en Nuevo Laredo, de la enfermera y del joven secuestrado. El silencio de la CNDH nos agravia a los mexicanos, a las mexicanas, a las víctimas. Al no hacer valer la autonomía con el Ejecutivo, se volvió en parte del propio gobierno”, insistió Ramos Vázquez.
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“Yo no recuerdo haber visto nunca a la presidenta de la CNDH con los familiares de los estudiantes de Ayotzinapa, con las víctimas de Tamaulipas, con las víctimas de Chiapas, con los defensores, con las defensoras, con los buscadores. No recuerdo que se haya pronunciado cuando empezaron a matar a las madres buscadoras. Siempre estuvo despachando cómodamente en sus oficinas porque no tiene compromiso ni valor para ponerse del lado del pueblo y no de la autoridad. Y ni qué decir de las Fuerzas Armadas porque justo se evidencia eso, que la CNDH se puso al servicio de las Fuerzas Armadas y eso le hizo mucho daño al país”, finalizó el defensor humanitario de Nuevo Laredo.