Frente a los señalamientos de los “adversarios” respecto a que no se cumplirán las promesas de su gobierno, de dar a la población sin seguridad social servicios de salud de la mejor calidad a nivel mundial, el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador expresó que acepta el reto de no fallar en ese compromiso.
Desde Chicoloapan, Estado de México, donde supervisó programas sociales, salió al paso de los críticos de la “Megafarmacia” recientemente inaugurada en Huehuetoca, también en el territorio mexiquense.
Utilizó su acostumbrada frase “me canso ganso”, para prometer que al finalizar su administración dejará en el país uno de los mejores sistemas de salud del mundo, ello, ya sin utilizar la palabra “Dinamarca”.
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“Dicen mis adversarios que no voy a poder cumplir, acabamos de inaugurar en Huehuetoca una megafarmacia para que no falte una sola medicina en ningún lugar en… hasta en el pueblo más apartado de México van a llegar todas las medicinas”, expresó.
“Dicen que no voy a poder, ¡acepto el desafío, me canso ganso de que vamos a dejar un sistema de salud de los mejores del mundo!”, enfatizó.
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Mejoras en salud
Ante maestros que fueron llevados a su evento en Chicoloapan y en todo momento le echaron porras a él y a la gobernadora del estado, Delfina Gómez, el Jefe del Ejecutivo Federal insistió en que antes de terminar su encargo, el sistema de salud mejorará.
Habrá centros de salud y hospitales “en buen estado”, con equipos nuevos, no faltarán los médicos generales ni especialistas y tampoco los medicamentos.
La atención médica será de calidad y gratuita, ya que se cumplirá con la realización de estudios a los pacientes y con las operaciones necesarias.
El titular del Ejecutivo aceptó que “falta” para alcanzar esos propósitos, no obstante, confió en cumplir con esas ofertas y con la basificación de todos los trabajadores del sector salud.
Aseguró que lo logrará, porque en su gobierno el dinero público se utiliza no para enriquecer a unos pocos, sino para retornarlo al “pueblo”.
Dijo que en otras administraciones el presupuesto quedaba en manos de una “minoría”, de la “oligarquía” que usaba al pueblo sólo en tiempos electorales, cuando les repartían a cambio del voto, materiales, “pollos, patos, chivos, puercos cochinos marranos, eso ya al carajo”, lanzó.
Refrendó que el presupuesto es “del pueblo” y se tiene que entregar al pueblo, y a su gobierno le ha ido “muy bien” entregando esos recursos, porque se “cerró la llave” de la corrupción.
El dinero público alcanza, porque ya no hay gobierno con lujos, aseguró.
Al afirmar que cumplió metas como desaparecer el Estado Mayor Presidencial, vender el Avión Presidencial, no endeudar al país y no permitir “gasolinazos”, el mandatario federal indicó que incluso ya se podría despedir de la administración a su cargo, porque ya dejó “desbrozado” el camino.