El titular del Juzgado Séptimo de Distrito en Morelos, José Leovigildo Martínez Hidalgo, ordenó a una escuela primaria de la entidad establecer protocolos para la prevención, detección y actuación ante casos de acoso escolar, además de proteger a una menor a quien un compañero le fracturó la nariz tras lanzarle un libro.
Al resolver un juicio de amparo, Martínez Hidalgo resaltó que, si bien la menor agredida egresó de dicho plantel, las autoridades escolares deberán darle seguimiento al procedimiento para restituirla en el pleno goce de sus derechos, todo ello derivado de las lesiones que le causaron en las instalaciones de la escuela.
La sentencia establece que, si bien la menor no estudia actualmente en el plantel, las autoridades deben atender este caso, ya que se afectó el derecho de la niña a recibir educación en un ambiente sano y libre de violencia.
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Asimismo, consideró que no han instrumentado las políticas necesarias para atender de forma adecuada la violencia escolar.
Este caso, llegó ante la justicia federal luego de que el abuelo de la menor promovió el juicio de amparo en contra del gobernador de Morelos y autoridades del Instituto de Educación Básica de la entidad, por la fractura de nariz que sufrió la niña dentro de las instalaciones escolares en las que cursaba el quinto grado.
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El juez ordenó a las autoridades educativas brindar asesoría personalizada a la familia para acceder a los beneficios de la póliza de seguro institucional con el que se cuenta para atender eventos como el suscitado.
Además de valorar el grado de afectación y la situación económica de la víctima, debiendo determinar los gastos devengados por la familia en la atención de la niña; e implementar acciones de prevención, capacitación y sensibilización dirigidos a la comunidad educativa en el tema de violencia escolar.