En la Cámara de Diputados, integrantes del Partido del Trabajo (PT) restaron importancia al desencuentro diplomático entre México y Perú, luego de que el Congreso de esa nación declarara persona “non grata” al Jefe del Ejecutivo Federal y que éste, determinara poner “en pausa” las relaciones con esa nación.
Incluso el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del recinto y diputado petista, Alfredo Femat, afirmó que esos sucesos no pasarán a mayores, porque el mandatario mexicano solo ha hecho declaraciones y manifestado su opinión.
No se han tomado medidas que generen incertidumbre en el territorio peruano, por lo que el asunto no pasará de las expresiones verbales, confió el parlamentario.
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Consideró que se puede dar por descartada una ruptura definitiva de los lazos bilaterales, a menos que las diferencias escalen, lo que anticipó, no ocurrirá.
Conflicto diplomático con Perú
También consideró que los dichos y posturas del Presidente mexicano respecto al gobierno peruano en manos de la Presidenta Dina Boluarte, al cual ha calificado de “usurpador”, no violan la llamada “Doctrina Estrada” que se sustenta en el principio de no intervención de México en asuntos internos de otros países.
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“Es muy claro la Doctrina Estrada en términos de que México no debe intervenir en asuntos internos y todo. El Presidente ha hecho declaraciones en términos de lo que ha pasado en Perú, pero yo creo que no pasa de ahí”.
“Malo que México tomara acciones, patrocinara, generara una situación de incertidumbre en Perú, pero son declaraciones, y cuando son declaraciones no pasan de ahí. Es una declaración del titular de uno de los poderes, no del país”.
AMLO, persona non grata
Señaló que la decisión de la autoridad peruana, de declarar “non grato” al mandatario mexicano se tomó en el contexto de sus comentarios con respecto al “golpe de Estado” en el territorio peruano.
Pero no es una situación preocupante, aseguró, al manifestar que “no pasa nada” y “se toma como tal”.
Descartó que dicha declaratoria vaya a tener mayores consecuencias políticas ni económicas para México, a menos que el Presidente Andrés Manuel López Obrador quiera o deba viajar a Perú, lo que por el momento no ocurrirá.
Enfriamiento de las relaciones México-Perú
El único efecto que la problemática podría tener, abundó, es el “enfriamiento” de las relaciones bilaterales, lo que será una situación coyuntural.
Coincidió con el Ejecutivo en que Perú tuvo un “golpe de Estado”, pero serán los órganos de gobierno de esa nación y su pueblo los que resuelvan esa problemática interna.
El legislador del PT añadió que la situación no superará las condiciones en las que actualmente se encuentra y tampoco afectará la relación interparlamentaria.