CONGRESO DE LA UNIÓN

Morena insiste en elegir ministros en urnas; lanza iniciativa de reforma constitucional

En la Comisión Permanente, el diputado federal Alejandro Robles propone cambios a los artículos 96 y 97 de la Constitución.

Alejandro Robles, diputado federal por Morena.
Alejandro Robles, diputado federal por Morena.Créditos: Facebook Alejandro Robles
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La bancada de Morena en la Cámara de Diputados, formalizó la presentación, ante la Comisión Permanente de la Unión, de la iniciativa perfilada por el Presidente de la República, cuyo fin es elegir a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y también a los magistrados, por “voto popular, directo y universal”.

El proyecto firmado por el diputado federal de Morena, Alejandro Robles, prevé cambios a los artículos 96 y 97 de la Constitución.

Indica que los ministros del Alto Tribunal serán electos por voto de la ciudadanía.

El procedimiento, será a través de la emisión en San Lázaro, de una convocatoria pública abierta con plazos y fechas límite improrrogables.

Se conformará un Comité Técnico de Evaluación conformado por siete “notables”, dos de los cuáles serán propuestos por el Presidente de la República, uno por el Pleno de la Corte, uno más por el Consejo de la Judicatura, uno por el Senado de la República y dos más por la Cámara de Diputados.

Una vez que los aspirantes sean evaluados, se elegirán cinco personas por cada puesto vacante. La lista con los nombres de los participantes se enviará al Instituto Nacional Electoral (INE).

El INE tendrá que ordenar en un plazo de hasta tres meses, la realización “del proceso electoral” para que los ciudadanos acudan a las urnas.

También deberá organizar al menos tres debates donde los “candidatos” expongan públicamente sus proyectos y plan de trabajo para la Corte.

El INE se encargará de realizar “la propaganda” de los distintos candidatos a la Corte, la cual será “neutralmente cromática e ideológica”.

Agrega que cuando la selección de ministros de la Corte coincida con procesos electorales federales, ambas votaciones se llevarán a cabo el mismo día.

Los aspirantes que obtengan más votos son los que recibirán constancia de mayoría del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y asumirán el puesto.

El texto de la Constitución vigente señala que los ministros de la Corte, se eligen a propuesta de una terna planteada por el Presidente de la República, cuyos integrantes deben ser valorados en el Senado de la República, y votados por mayoría calificada de dos terceras partes.

Elección magistrados

Respecto a la selección de magistrados y magistradas de circuito, juezas y jueces de distrito, el proceso de selección será igual al de los ministros de la Corte, planteó el diputado Robles Gómez.

Los jueces y magistrados señalados durarán solo cuatro años en el puesto y podrán ser ratificados por un periodo similar.

En el caso de juzgadores locales, también tendrán que ser seleccionados por voto en urnas, y de la organización de esos procesos, se encargarán el Consejo de la Judicatura Federal, o sus equivalentes en las entidades de la República, por la Cámara de Diputados o los congresos estatales, según corresponda.

Ministros seleccionados por acuerdo cupular

En la argumentación, el promovente dijo que el Poder Judicial no está completamente bajo el “escrutinio público”, lo que ha provocado que los niveles de corrupción en esa instancia aumenten.

Afirmó que la forma vigente de elegir a los ministros, se centra en acuerdos “cupulares”, donde los seleccionados quedan “debiendo el favor” a quienes los propongan, incluyendo al Primer Mandatario y al Senado.

Indicó que “en total acuerdo con el Presidente de la República (…) se debe dar mayor participación política a la ciudadanía en asuntos públicos”.

Dicha participación se incrementará, consideró el parlamentario, al someter a voto popular los nombramientos de ministros, jueces y magistrados, como se llevaba a cabo, conforme a la Constitución de 1857.

Aseguró que el procedimiento propuesto no es extraño para México ni en el mundo, ya que la mayoría de los jueces en Estados Unidos se eligen por voto popular; en Japón, son “ratificados” por ese mismo método, y en Bolivia también son sometidos a voto en urnas.

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