La Cámara de Diputados aprobó reformas a la Ley Federal del Trabajo, a partir de tres iniciativas distintas, incluyendo la del Presidente de la República, con el fin de actualizar y ampliar las Tablas de Enfermedades de Trabajo para la Valuación de Incapacidades Permanentes Resultantes de Riegos de Trabajo; así como el Catálogo de las Cédulas de Valuación de las Enfermedades de Trabajo.
Los cambios a la Ley Federal del Trabajo y que serán turnados al Senado de la República, avanzaron en San Lázaro, con una votación unánime de 427 a favor.
Enfermedades asociadas al trabajo
Al presentar el proyecto, una de las congresistas promoventes, Leticia Zepeda, explicó que se reconoce como enfermedad de origen laboral a la COVID-19, se amplía la lista de cánceres asociados a la realización del trabajo y también se incluye a la endometriosis como enfermedad discapacitante para realizar trabajos.
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La congresista del Partido Acción Nacional (PAN) detalló que aumentarán de 161 a 194, la lista de enfermedades que las personas pueden adquirir en sus espacios de trabajo; de 409 a 524 las lesiones por riesgos laborales a tomar en cuenta al momento de valorar incapacidades permanentes
Las enfermedades infecciosas y parasitarias reconocidas en la ley, aumentó de 21 a 41, incluyendo el coronavirus.
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Precisó que en materia de cáncer de origen laboral, el listado subió de 4 a 30 padecimientos distintos.
La Ley Federal del Trabajo también reconocerá como enfermedades ligadas a la jornada laboral, la ansiedad, los trastornos no orgánicos del sueño, el estrés y trastornos depresivos.
Endometriosis como enfermedad discapacitante para el trabajo
Zepeda Martínez indicó que las modificaciones legales tienen el propósito de reforzar la protección a los trabajadores, ante las enfermedades que se pueden contraer al realizar actividades laborales y los riesgos de lesiones, también en el trabajo.
En particular, se refirió al caso de la endometriosis, que se incluye en el listado de enfermedades que se valoran para la autorización de incapacidades permanentes, tal y como lo reconoce la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Refirió que en México, una de cada 10 mujeres tiene riesgo de presentar esa enfermedad que no tiene cura, es incapacitante, pone a las mujeres en desventaja competitiva, es dolorosa, compleja e impide al 60 por ciento de las mujeres “acceder a la maternidad”.
La legisladora de Acción Nacional destacó y reconoció el aporte de organizaciones de la sociedad civil, para impulsar la integración de ese padecimiento a las listas que contempla la ley laboral.