Presuntos estudiantes normalistas que acompañaron la protesta de los padres y madres de los 43 de Ayotzinapa, arremetieron con piedras y explosivos contra la fachada de la Fiscalía General de la República (FGR), dejando como saldo más de 13 policías lesionados.
Como parte de la Jornada Nacional de Lucha ante la Deuda de Justicia del Estado “Por los caminos de la verdad” y ante el octavo aniversario de la desaparición de los estudiantes, realizaron una protesta frente a la FGR que los recibió con un fuerte operativo de elementos de la policía de la Ciudad de México.
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El abogado de los padres y las madres, Vidulfo Rosales, reclamó a nombre de las familias, que hasta el momento no se haya detenido a los militares implicados en el caso, que se libere a presuntos responsables y que las investigaciones no avancen; además dijo, la detención del ex procurador y autor de la “Verdad Histórica” Jesús Murillo Karam, solo ha sido mediática y una estrategia política.
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Al finalizar el acto político, se dio a los padres y normalistas la indicación de subir a los autobuses y un último grupo de estudiantes de Ayotzinapa, todos con el rostro cubierto pidieron a los medios retirarse del frente y lanzaron cohetones y piedras que tomaron por sorpresa a los elementos.
Ante el estallido sólo atinaron a levantar los escudos para protegerse, sin embargo al menos 13 de ellos resultaron con lesiones que requirieron su traslado a hospitales.
Vidulfo Rosales responsabilizó al Fiscal Alejandro Gertz Manero de cualquier atentado que sufran normalistas, padres o madres y lamentó que ahora sean las víctimas de los delitos, quien tengan que sufrir las consecuencias “del uso de la fuerza del estado”.