En la Cámara de Diputados, se propuso integrar al Reglamento interno, disposiciones para evitar ofensas, faltas de respeto, muestras de intolerancia y casos de violencia de género, en especial contra las congresistas.
Ello, durante el desarrollo de las sesiones ordinarias en el Pleno.
Durante la presente Legislatura, se han registrado numerosos incidentes de ese tipo, que incluso han derivado en denuncias de unos congresistas contra otros y la presentación de distintos expedientes ante el Comité de Ética de la Cámara.
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Moción por violencia política en razón de género
La diputada del Partido del Trabajo (PT), Lilia Aguilar planteó integrar a la norma, las mociones por violencia política en razón de género durante las sesiones ordinarias con el fin de obligar a todos los integrantes del recinto a ser respetuosos y frenar agresiones en particular contra diputadas, pero también contra los diputados.
Los cambios propuestos establecen que la moción será concedida por la Mesa Directiva de la Cámara, cuando en la discusión de un asunto, haya menciones a una diputada de manera implícita o explícita, con expresiones alusivas a su género.
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Esto, con el fin de discriminar y obstaculizar su libre desarrollo en la esfera pública o privada; así como de limitar, anular o menoscabar su derecho a ejercer sus atribuciones y prerrogativas como legisladora federal.
La congresista o el congresista que haya presentado la moción, deberá solicitar a la Mesa Directiva su autorización, y tendrá oportunidad de hacer una breve exposición de los hechos.
La Mesa Directiva podrá determinar si las peticiones en cuestión son atendibles, en el caso de las que las expresiones emitidas por los oradores en turno, lo ameriten.
La Directiva podrá ordenar que los dichos impugnados sean retirados del Diario de los Debates, en caso de que se solicite; aunado a que remitirá la versión estenográfica al Comité de Ética, con el fin de determinar si procede alguna sanción.
Refirió que el Reglamento de San Lázaro prevé mociones para objetar procedimientos, acuerdos, llamar al orden, ilustrar a la asamblea y rebatir decisiones de la Mesa Directiva, pero no contra la violencia política en razón de género.
Prohibida la discriminación
En su iniciativa, la diputada Aguilar Gil recalcó que la Constitución prohíbe todo tipo de discriminación, incluyendo la asociada al género, opiniones, preferencias sexuales, y toda aquella que atente contra la dignidad humana y tenga como fin menoscabar o anular los derechos y libertades de las personas.
Señaló que el país ha reportado destacados avances en la defensa de los derechos de las mujeres; y en el ámbito parlamentario, se ha alcanzado la paridad con la existencia en la actual Legislatura, de 250 diputados y diputadas; sin embargo, persiste una relación de desigualdad incluso en el Legislativo.
Apuntó que la desigualdad de género, da pie a agresiones y violencia contra una persona o un grupo de personas, precisamente en razón de su género, lo que acentúa prácticas de abuso de poder, así como la existencia de normas no inclusivas y perjudiciales para una determinada parte de la población.
Violencia contra legisladoras
Apuntó que de acuerdo a la Unión Interparlamentaria a la cual pertenece México, se registra una tendencia a la alza en los actos de violencia contra mujeres congresistas, a través de suspensiones y órdenes de pérdida del mandato injustificadas, falta de juicios justos, amenazas, actos de intimidación y violaciones a la libertad de expresión.
Los datos del organismo citado, refieren a que el 34 por ciento de las mujeres parlamentarias han sufrido algún tipo de agresión como las referidas; mientras que el 18 por ciento de los hombres parlamentarios han sido víctima; y el 32 por ciento del total de las conductas de ese tipo, tuvieron lugar en parlamentos del continente americano.
Agresiones entre legisladores y legisladoras
En el contexto de su iniciativa, la diputada Aguilar mencionó los casos del integrante de la bancada del PAN, Gabriel Quadri y distintas agresiones lanzadas contra la diputada integrante de la bancada de Morena, Salma Luévano;
Habló del también diputado panista Mario Mata.
La legisladora del PT, no mencionó el caso de su compañera de bancada, Margarita García, que ha recibido insultos, acusaciones y señalamientos discriminatorios.
Sin embargo, la diputada García García ha respondido en la misma medida, lanzando improperios, calificativos y gritos a diputados y diputadas de la oposición a los que suele llamar: traidores, asesinos, borrachos y drogados.