Los pueblos originarios que han resistido a los embates de los gobiernos, grupos armados e intentos de exterminarlos para quedarse con sus tierras y riquezas naturales, caminaron por la Ciudad de México para exigir un alto a la militarización del país.
Encabezados por el Congreso Nacional Indígena (CNI) y la Coordinación Metropolitana Anticapitalista y Antipatriarcal, llegaron después de caminar desde el Angel de la Independencia a Palacio Nacional acompañados por los padres y madres de los 43 de Ayotzinapa, por estudiantes de diferentes escuelas públicas y ciudadanos que se sumaron a su paso, donde los esperaba un fuerte operativo policiaco.
Ahí, María de Jesús Patricio Martínez vocera del CNI y ex precandidata presidencial, le mando un mensaje al mandatario Andrés Manuel López Obrador, “no estamos de acuerdo con la militarización, ni tampoco en cómo están masacrando a los pueblos”.
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Por su parte Rosario Hernández, vocera de la organización popular Francisco Villa de izquierda independiente, evidenció que el presidente, con esta defensa irrestricta al Ejército, se ha puesto del lado de quienes han masacrado al pueblo y la lucha popular.
Estudiantes de universidades públicas, exigieron al Ejecutivo que el dinero que invierte en las fuerzas armadas y la militarización del país, se utilice para mejorar la educación pública y crear mejores oportunidades para los jóvenes del país.
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Aracely Osorio, en representación de las Mujeres que Luchan, reprochó que la guerra que encabeza este gobierno deje un saldo diario de 11 mujeres muertas.
Durante el mitin, solo un grupo de encapuchados, denominados El Bloque Negro, arremetió contra los policías que resguardaban Palacio Nacional, sin embargo, el CNI hizo un llamado a la no violencia y el hecho no pasó a mayores.