La Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX) determinó el ejercicio de la acción penal contra cinco empleados del “Bar Curazao”, ubicado en la colonia Chimalistac, delegación Álvaro Obregón, identificados como los que más se beneficiaban económicamente de los servicios sexuales que las mujeres presuntamente ofrecían.
En tanto, agentes de la Policía de Investigación de la Procuraduría, y de la Policía Federal, se trasladaron la madrugada de ayer al citado bar para dar cumplimiento a la orden de cateo girada por un juez de control.
Durante la ejecución del mandato, cinco de las víctimas solicitaron el apoyo de los servidores públicos, toda vez que dijeron no estar de acuerdo que los inculpados obtuvieran beneficios económicos del trabajo que realizan.
“Tras la denuncia, las mujeres identificaron al administrador del bar y al capitán de meseros como las personas que, además de promoverlas, se quedaban con la mayor parte de las ganancias.
“También señalaron a uno de los meseros como el que presuntamente las promovía y aleccionaba en caso de que hubiera algún operativo; a la boletera, quien supuestamente las promovía y a un hombre de 51 años que utilizaba varios nombres, como el que las dirigía”. afirmó.
La fiscal Bautista Rebollar mencionó que la boletera fue vista cuando recibía dinero de uno de los clientes al tiempo que el mesero conducía a una de las víctimas a uno de los privados donde se encontraba el hombre que les había pagado por el servicio sexual.
Por estos hechos, los cinco imputados fueron trasladados ante el agente del Ministerio Público de la Fiscalía Central de Investigación para el Delito de Trata de Personas, donde se inició una carpeta de investigación por el delito de trata de personas.
En las próximas horas se llevará a cabo la audiencia inicial para control de detención en el Reclusorio Preventivo Sur, a fin de que el juez de control califique de legal la detención, los vincule a proceso y les imponga la prisión preventiva oficiosa como medida cautelar.
@amarilloalarcon