Condenado la semana pasada por golpismo, el expresidente brasileño Jair Bolsonaro salió este martes 16 de septiembre de su prisión domiciliaria para ingresar de urgencia a un hospital de en Brasilia tras “sentirse mal”, informó uno de sus hijos en X, quien indicó que el líder de extrema derecha tuvo una “fuerte crisis de hipo, vómito y presión baja”.
Acompañado por policías que vigilan su arresto domiciliario, según su hijo, Jair Bolsonaro fue trasladado al hospital en Brasilia por “tratarse de una emergencia”, señaló el senador Flávio Bolsonaro respecto al estado de salud de quien a sus 70 años fue condenado a 27 años de prisión por golpista de Estado, en un juicio histórico la semana pasada ante la corte suprema.
Por esto se le acusó de golpista a Bolsonaro
Antes de ser trasladado al hospital, a Jair Bolsonaro se le dictó la condena por golpista debido a que el máximo tribunal lo consideró culpable de liderar una organización criminal para aferrarse al poder en 2022, tras perder las elecciones contra Luiz Inácio Lula da Silva, además de que entre mayo y julio de 2021 hizo unas declaraciones frente al Palacio de la Alvorada, residencia oficial en Brasilia, donde llegó a comparar el cabello de una persona negra con una “granja de cucarachas”.
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Ah, pero eso no es todo, pues también fue condenado a pagar una indemnización de un millón de reales (unos 159 mil euros) por daño moral colectivo, debido a sus comentarios de “racismo recreativo”, dado que empleó el humor para intentar encubrir el carácter discriminatorio de sus declaraciones. El tribunal también ordenó que el gobierno federal pague una suma idéntica, pues las declaraciones se produjeron en el ejercicio de la autoridad institucional de la Presidencia, aunque la administración actual, encabezada por Luiz Inácio Lula da Silva desde 2023, presentará una demanda para reclamar la correspondiente indemnización a Bolsonaro.
Jair Bolsonaro, delicado desde 2018
Desde agosto en su residencia en Brasilia, el exmandatario (2019-2022) se encuentra en prisión domiciliaria preventiva, acusando recurrentes problemas de salud en los últimos meses supuestamente derivados de un ataque con cuchillo que sufrió durante la campaña electoral de 2018 y que le trajo secuelas en la zona abdominal.
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Tantos que el domingo fue también al hospital para que le extrajeran ocho lesiones cutáneas para su posterior biopsia, además de haber sido sometido a varias intervenciones quirúrgicas desde que sufrió la puñalada en el abdomen que lo dejó bastante débil y por la que desarrolló incluso una leve anemia, probablemente debido a una mala nutrición durante el último mes.