Las autoridades federales de Estados Unidos confirmaron que el asesinato del activista conservador Charlie Kirk podría derivar en una solicitud de pena de muerte contra el presunto responsable, Tyler Robinson. Así lo informó la Fiscal General Pam Bondi, quien calificó como “muy real” esta posibilidad, especialmente por tratarse de un crimen premeditado.
"En Utah, la pena capital puede ejecutarse mediante fusilamiento", detalló Bondi, señalando que tanto los fiscales federales como las autoridades estatales trabajan para aplicar el castigo máximo en este caso.
Evidencia contundente: ADN y una nota que revela el motivo
El director del FBI, Kash Patel, aseguró que se ha identificado el ADN de Robinson en dos objetos clave hallados en la escena del crimen: un destornillador y una toalla que envolvía el arma homicida.
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"Tenemos el ADN del destornillador que se encontró en la azotea y el de la toalla que envolvía el arma de fuego", explicó Patel en entrevista con Fox News. Los agentes señalan que Robinson disparó desde un tejado cercano al campus de la Universidad Utah Valley (UVU), y luego se dirigió a una zona boscosa para esconder el rifle de caza que utilizó.
Además, el FBI sostiene que Robinson dejó una nota en la que escribió: “Tengo la oportunidad de eliminar a Charlie Kirk y la voy a aprovechar”, confirmando así la hipótesis de premeditación.
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JD Vance culpa al “extremismo de izquierda” por el crimen
Durante un episodio especial del pódcast de Charlie Kirk, que fue presentado por el vicepresidente de EU, JD Vance —amigo cercano del activista—, se responsabilizó directamente al “extremismo de izquierda” por crear un clima que incita a la violencia.
"Este no es un problema de ambas partes. Si ambas partes tienen un problema, entonces una de ellas tiene un problema mucho mayor y maligno", dijo Vance, aludiendo al partido demócrata y a lo que considera una radicalización del discurso político en ese sector.
Vance aprovechó el espacio para rendir homenaje a Kirk, al tiempo que pidió una reflexión sobre la polarización ideológica que vive el país.
El asesinato de Charlie Kirk ha encendido un debate político en Estados Unidos, no solo por la gravedad del crimen, sino por las tensiones ideológicas que lo rodean. Con la posibilidad de pena de muerte sobre la mesa y pruebas que apuntan a la premeditación, el caso se perfila como uno de los más relevantes en el escenario político y judicial estadounidense actual.
Con información de EFE.
