El próximo 12 de octubre de 2025 entrará en funcionamiento el nuevo Sistema de Entradas y Salidas (EES) en Europa, una herramienta digital que transformará la forma en que se registran los ingresos y salidas de viajeros en los 29 países del espacio Schengen.
Para los mexicanos que visiten el continente por turismo o negocios de corta duración, este cambio sustituirá el tradicional sello en el pasaporte por un registro electrónico con datos biométricos.
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¿Cómo funcionará el EES?
La implementación será gradual y se extenderá hasta el 10 de abril de 2026, permitiendo a las autoridades fronterizas y aeropuertos adaptar sus procesos. Durante esta etapa, el sistema coexistirá con el sellado físico en algunos puntos de control.
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El EES registrará de forma automática cada entrada y salida de ciudadanos no pertenecientes a la Unión Europea, incluyendo a los mexicanos. Se almacenarán datos como la fecha y lugar de cruce, además de información biométrica: fotografía facial y, en el caso de quienes no requieran visa, cuatro huellas dactilares.
Este sistema busca:
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- Reducir tiempos de espera gracias a controles más rápidos y opciones de autoservicio.
- Evitar que visitantes excedan el tiempo máximo permitido de 90 días en un periodo de 180 días.
- Mejorar la seguridad al detectar identidades falsas o pasaportes fraudulentos.
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Lo que significa para los mexicanos
Los turistas mexicanos seguirán sin necesitar visa para estancias cortas. No habrá trámites previos, ya que el registro se hará directamente en aeropuertos, puertos o pasos terrestres. Sin embargo, para usar los carriles de autoservicio será necesario contar con pasaporte biométrico.
Aunque el cambio es principalmente tecnológico, se recomienda llegar con anticipación a los puntos de control, sobre todo durante los primeros meses de implementación, para evitar contratiempos.
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Beneficios y seguridad
La Comisión Europea asegura que el EES en Europa agilizará el cruce de fronteras y fortalecerá la seguridad al permitir un seguimiento más preciso de las entradas y salidas. La información recolectada estará protegida por las leyes europeas de privacidad y solo será usada para los fines establecidos.