El consumo de fentanilo es un problema de Estados Unidos, no de China, por lo que el gobierno de aquella nación pidió a su contraparte a responsabilizarse de la situación.
Vía redes sociales, la embajada china en México, emitió una Declaración en la que señala que, “la parte estadounidense debe ver y tratar de manera objetiva y racional su propio problema del fentanilo en lugar de calumniar, difamar y echar la culpa a otros países”.
Lo anterior, en respuesta a una publicación difundida por la embajada estadounidense del 6 de febrero en la que se acusa que “90 por ciento de las muertes por opioides en Estados Unidos se deben al fentanilo que llega a través de México y Canadá, y cuyos precursores proceden de China”.
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Tras lo anterior, consideró como retórica las afirmaciones de parte de la embajada de EU sobre el fentanilo y su intento por responsabilizar a otros del grave problema que representa desde hace varios años el consumo de fentanilo.
“Hemos tomado nota de que recientemente, la embajada de los Estados Unidos en México criticó en su cuenta de X que los precursores del fentanilo de Estados Unidos provienen de China, con lo cual está echando culpa a país ajeno”, señala la Declaración de la embajada asiática.
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Agregó que su país cuenta con las políticas antidrogas “más estrictas y más rigurosamente implementadas” en el mundo.
“Con espíritu humanitario, China ha dado apoyo a Estados Unidos en su lucha contra el problema del fentanilo. A petición de la parte estadounidense, China anunció en 2019 la clasificación integral de los fármacos del grupo del fentanilo como sustancias controladas, siendo el primer país en el mundo en hacerlo oficialmente”.
Dejó en claro que el gobierno chino ha emprendido “una amplia cooperación antidrogas” con Washington, la cual “ha logrado resultados notables”.