La guerra en Ucrania vivió una de sus jornadas más violentas este miércoles, tras un ataque masivo por parte de Rusia que lanzó 476 drones y 48 misiles contra infraestructura civil y energética en al menos diez regiones del país. El episodio más devastador ocurrió en Ternópil, al oeste de Ucrania, donde 25 civiles murieron, incluidos tres menores de edad, y más de 70 personas resultaron heridas.
El presidente Volodímir Zelenski confirmó que un edificio de viviendas fue impactado directamente, lo que agravó el número de desaparecidos y elevó los temores de que la cifra de víctimas aumente conforme avancen las labores de rescate.
Oleada de drones y misiles: el sistema energético ucraniano, bajo ataque
La Fuerza Aérea ucraniana informó que logró interceptar 442 drones y 41 de los 47 misiles de crucero lanzados por las fuerzas rusas. En esta operación defensiva participaron aviones de combate F-16 y Mirage-2000, suministrados por países occidentales, que interceptaron al menos diez misiles.
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Sin embargo, los proyectiles que lograron atravesar la defensa aérea provocaron daños significativos. Entre las afectaciones más graves se registraron:
- Járkov (nororiente): daños severos en instalaciones de transporte y energía.
- Ivano-Frankivsk y Leópolis (oeste): ataques contra infraestructura energética, que dejaron además tres heridos en Ivano-Frankivsk.
El oeste del país volvió a quedar bajo fuerte presión militar, evidenciando la estrategia rusa de debilitar la capacidad energética de Ucrania de cara al invierno.
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Zelenski pide más sanciones: “La presión sobre Rusia es insuficiente”
Tras el ataque, Zelenski hizo un llamado urgente a la comunidad internacional. Denunció que esta ofensiva demuestra que el Kremlin no se siente limitado por las sanciones actuales.
“Cada ataque descarado contra la vida cotidiana indica que la presión sobre Rusia es insuficiente”, escribió en Telegram.
El mandatario ucraniano solicitó más sanciones, mayor aislamiento internacional para Vladímir Putin y el envío de ayuda militar adicional, especialmente sistemas antiaéreos.
Como parte de su ofensiva diplomática, Zelenski anunció que se reunirá este miércoles con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan para discutir nuevas vías que permitan avanzar hacia una “paz justa”.
Condena internacional y preocupación por el número de víctimas
Tras la masacre en Ternópil, los ministros de Exteriores de Países Bajos, Noruega, República Checa, Estonia y Letonia expresaron su solidaridad con Ucrania y condenaron el ataque. La preocupación crece ante el número de desaparecidos, lo que podría elevar el balance final de víctimas mortales.
El ataque subraya la urgencia de fortalecer la respuesta internacional para frenar la escalada del conflicto y proteger a la población civil.