El presidente ruso, Vladímir Putin, firmó este lunes un decreto para ratificar el acuerdo de asociación estratégica y cooperación con Venezuela, marcando un nuevo capítulo en las relaciones bilaterales entre Putin y Venezuela. Este pacto busca fortalecer los lazos políticos, económicos y de defensa entre ambos países, en un contexto internacional marcado por tensiones con Occidente.
Un pacto con alcance global
El acuerdo fue inicialmente suscrito en mayo de 2025 durante la visita del presidente venezolano, Nicolás Maduro, a Moscú, en el marco de las celebraciones del 80.º aniversario del Día de la Victoria en la Gran Guerra Patria. Tras la aprobación del Senado ruso y de la Duma, el tratado quedó oficialmente ratificado esta semana, consolidando una alianza que Moscú y Caracas consideran “estratégica y duradera”.
Áreas clave de cooperación
El documento establece una expansión significativa de la colaboración entre ambos países en sectores clave como energía, minería, transporte y comunicaciones. Además, prevé mecanismos de autonomía financiera para facilitar el comercio y la inversión sin depender de sistemas occidentales, así como proyectos conjuntos en petróleo, gas y minería.
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También se refuerza la coordinación energética en organismos internacionales como la OPEP y el Foro de Países Exportadores de Gas, además de una cooperación técnico-militar destinada a fortalecer las capacidades defensivas y garantizar la seguridad de ambas naciones.
Contexto político y geoestratégico
Según el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, la ratificación simultánea del acuerdo en Moscú y Caracas es “crucial en un momento en que Venezuela enfrenta una presión sin precedentes, incluida la militar, por parte de los Estados Unidos”. Esta declaración refuerza la visión de Rusia de respaldar a su aliado latinoamericano frente a las sanciones y las tensiones geopolíticas internacionales.
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Con este tratado, Rusia y Venezuela buscan profundizar su cooperación más allá de lo económico, apuntando hacia una alianza política y militar estable que contrarreste la influencia occidental en la región. El acuerdo ratificado representa un paso decisivo en la consolidación de los vínculos entre Putin y Venezuela, una relación que se proyecta como uno de los ejes estratégicos más relevantes para ambos países en el escenario global.
Con información de EFE.