Impactantes declaraciones con tonos más amenazantes comienzan a desprenderse por parte de Irán y de su Parlamento, donde ya fue lanzada la advertencia sobre tomar venganza, cuya víctima sería el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.
Irán vive una situación de calma tensa ante la posibilidad de un inminente ataque contra Israel por el asesinato del líder político del movimiento islamista palestino Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán, después de reiterar este lunes que “es necesario castigar” a ese país.
La amenaza de muerte para Benjamín Netanyahu.
Y a esto, se le suman las preocupantes declaraciones por parte de un miembro del Parlamento iraní, quien amenazó con matar a Benjamín Netanyahu, por el asesinato de Haniyeh.
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"El régimen sionista se ha vuelto tan arrogante que mató a nuestro invitado en nuestra querida patria, no nos conformaremos con matar a menos que Netanyahu", aseveró Mohammad Qasim Osman, representante de la ciudad de Bukán.
La posible venganza de Irán
Tras el asesinato de Haniyeh el pasado 31 de julio, en un ataque contra su residencia en Teherán y con un proyectil de corto alcance, las autoridades iraníes han asegurado que la venganza es “inevitable”, sin importar las consecuencias.
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Esas amenazas han ido tomando un tono más agresivo, hasta el punto en que este lunes la Guardia Revolucionaria iraní advirtió de que, con actos como el asesinato de Haniyeh, Israel “está cavando su tumba”.
“Son las tumbas que ellos mismos cavan y gradualmente se enterrarán en estas tumbas”, afirmó el comandante en jefe de la Guardia, el general de división Hosein Salami.
Irán busca contraatacar por el asesinato de Ismail Haniyeh
El portavoz del Ministerio de Exteriores de Irán, Naser Kananí, dijo que es el “derecho inalienable” de su país responder al asesinato de Haniyeh, que estaba de visita oficial en la capital iraní.
Ciudadanos en Irán han mostrado su preocupación por la escalada de la violencia en la guerra, y la notoria decisión del país en tomar venganza por la muerte del jefe del buró político del grupo islamista Hamás, Ismail Haniyeh. Ahora, el blanco se pone con Benjamín Netanyahu.