En el mundo actual, existe una crisis de adicción a los opioides que está alcanzando nuevos límites y fronteras. La preocupación se expande con la llegada de la droga Frankestein, un nitazeno que es 40 veces más potente que el fentanilo, y 300 veces más que la heroína.
Esta droga se expande a gran velocidad por toda Europa, encendiendo las alarmas en diversos países, como es el caso de Reino Unido, cuyo gobierno prohibió recientemente 15 opioides sintéticos, entre ellos 14 nitazenos, clasificándolos como drogas de clase A en virtud de la Ley sobre el Consumo Indebido de Drogas de 1971.
"Los opiáceos sintéticos son mucho más tóxicos que la heroína y han causado miles de muertes en el extranjero”; dijo el Ministro de Policía y Delincuencia de Reino Unido, Chris Philp.
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El origen de los nitazenos
Los nitacenos se desarrollaron en la década de 1950 en la ciudad suiza de Basilea, gracias a unos científicos de Ciba Pharmaceuticals. Su objetivo principal era crear un analgésico muy potente, para ser una alternativa de la morfina.
Anteriormente, se recetaba a personas con cáncer que padecían mucho dolor, o a gente que acababa de recuperarse de una cirugía. Debido a sus características, salió del mercado legal por los riesgos de sus efectos y evidente adicción en los pacientes.
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La droga Frankestein
Se dice que este opioide se fabrica en laboratorios clandestinos, de los cuales, muchos de ellos provienen de China; revela Daily Mail.
Entre junio de 2023 y el pasado mes de febrero, 76 personas murieron a causa de esta sustancia en Inglaterra, 17 en Escocia y ocho en Gales. La ciudad más afectada por los nitazenos fue Birmingham.
La droga Frankenstein se cobró las vidas de 75 mil personas tan solo en 2022, por lo que ya es considerado parte de la epidemia de opioides que azota en Europa.