Un tribunal en Estados Unidos investigará si el príncipe Harry de Inglaterra, obtuvo de forma irregular su visa para entrar a dicho país.
Lo anterior, luego de que se diera a conocer el presunto consumo de sustancias nocivas para la salud por parte del hijo del rey Carlos III, en su libro “Spare”, pues se generaron dudas sobre el trámite.
Será un tribunal de Washington, el que evaluará el martes, una demanda que interpuso la Fundación Heritage, de acuerdo con la agencia EFE.
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Se trata de un laboratorio de ideas de ideología conservadora, que presentó la denuncia contra el Departamento de Seguridad Nacional de EU (DHS), para obtener información que se relaciones con el proceso de aprobación de la visa del nieto de la fallecida reina Isabel II.
Las dudas sobre el proceso de visa del príncipe Harry
La Fundación Heritage argumentó en el documento, al que tuvo acceso la cadena CBS, que la ley en Estados Unidos “suele considerar a una persona inadmisible para su entrada” en dicha nación, en caso de que haya pruebas de que haya consumido drogas anteriormente.
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"La amplia cobertura de los medios ha puesto de relieve la cuestión de si el DHS admitió de forma adecuada al duque de Sussex en vista del hecho de que ha admitido públicamente cometer delitos de drogas tanto en EU como en el extranjero".
Además, la demanda busca que el historial de inmigración del príncipe Harry se haga público, debido al “enorme interés” del caso.
¿Qué dijo el nieto de la reina Isabel II sobre el consumo de Drogas?
Es de recordar que en su libro de memorias “Spare”, el duque de Sussex contó que durante su adolescencia, consumió sustancias ilícitas, tales como cocaína y marihuana.
También, que sin dar detalles sobre identidad o si era vidente, consultó a una mujer con “poderes”, que según le dijo, la fallecida Diana de Gales, aprobaba su decisión de comenzar una nueva etapa en EU, a lado de su esposa Meghan Markle.
Y es que, el príncipe Harry y la actriz estadounidense viven en el estado de California desde 2020, luego de haber tomado la decisión de abandonar la familia real británica.