Luego de estar hospitalizado por nueve días en el Hospital Gemelli, el papa Francisco fue dado de alta y como es costumbre en su personalidad, no dejó pasar el momento sin bromear con los presentes.
El sumo pontífice ingresó a la clínica el pasado 7 de junio para someterse a una operación de una hernia abdominal.
En punto de las 8:00 horas locales, el líder del Vaticano salió por la puerta principal en silla de ruedas y ya lo esperaban algunos integrantes de los medios de comunicación, así como decenas de personas.
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"Gracias por lo que hacéis", dijo a los periodistas que le esperaron a la salida.
¿Qué más dijo el papa Francisco al salir del hospital?
Sin embargo, no dejó pasar este momento sin lanzar una pequeña bromea hacia los reporteros.
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“Estoy todavía vivo”, dijo el santo padre.
Es así como apareció muy sonriente y estuvo acompañado hasta el coche por el cirujano que le operó de la hernia abdominal y también en julio de 2021 del colon, Sergio Alfieri.
A pesar de esas palabras alegres, el pontífice también lamentó la tragedia de los migrantes en el mar Jónico, por lo que dijo que siente “tanto, tanto dolor”.
¿Cómo se encuentra el pontífice?
El doctor afirmó a los medios que "está bien, mejor que antes", en referencia a los dolores que le causaba la hernia abdominal, y que continuará la recuperación en el Vaticano aunque "ya ha reanudado el trabajo".
Además, aseguró que el santo padre ya confirmó todos los viajes (Mongolia y Lisboa) y que "los podrá afrontar mejor porque no tiene el malestar que tenía antes".
"Será un papa más fuerte que antes", agregó el cirujano.
Antes de seguir su camino, el papa Francisco quiso detenerse en la Basílica de Santa María La Mayor para rezar, como hace antes y después de sus viajes, ante el ícono de la Virgen "Salus Populi Romani". / Con información de EFE